Salah Abdeslam, único superviviente del grupo de terroristas islamistas implicados en los atentados de noviembre de 2015 en la sala Bataclán, en París, se ha negado a comparecer en el inicio del juicio en Bélgica por los ataques en el aeropuerto y el metro de Bruselas de 2016 afirmando que el proceso arranca con "injusticias".

El juicio ha arrancado este lunes con una sesión preliminar técnica para ordenar el proceso y en la que ninguno de los nueve acusados por los atentados, que dejaron 32 víctimas mortales en el aeropuerto y el centro de Bruselas, ha declarado ante el tribunal tras denunciar las mamparas cerradas e individuales en las que tendrán que comparecer.

Según los abogados de los acusados, estos cubículos atentan contra los derechos de la defensa porque impide el contacto espontáneo con sus clientes. Asimismo, consideran que vulnera la presunción de inocencia, pues proyecta una imagen de los encarcelados que induce a pensar que son culpables.

"Reconsideraré mi decisión por solidaridad. El juicio comienza injustamente. Quería comparecer pero como la mayoría de los coacusados no comparecen, no compareceré", ha señalado Abdeslam, en declaraciones que recoge el diario belga 'Le Soir'.

El más conocido de los sospechosos ha revertido así su decisión inicial de declarar. Seis de los acusados han sido llevados de nuevo a prisión, quedando solo tres en el banquillo, informa el medio.

El macroproceso tiene lugar en una sede acondicionada para la ocasión, en medio de grandes medidas de seguridad, en las antiguas instalaciones de la OTAN a las afueras de Bruselas y se espera que se desarrolle durante seis meses.

En el banquillo se sientan nueve de los diez acusados, después de que Osama Atar, el considerado 'cerebro' de la célula yihadista esté desaparecido, probablemente abatido en operaciones antiterroristas de Estados Unidos en Siria.   

Cadena perpetua en Francia

Abdeslam fue condenado en junio de este año a cadena perpetua en Francia por los atentados terroristas de la sala Bataclan de noviembre de 2015 que acabó con la vida de 90 personas.

La justicia francesa cumplió la solicitud de la Fiscalía, que había pedido aplicar la pena más dura al considerarlo "coautor" de la matanza. Tanto Abdeslam como su defensa se opusieron a la propuesta del Ministerio Público, que además tildaron de "pena de muerte social".

De nacionalidad belga, se trata del único componente con vida de la célula que organizó y perpetró el ataque en Francia. Meses después participó en el comando que llevó a cabo un nuevo atentado en Bélgica.