‘First Dates’ sigue abriendo las puertas de su restaurante cada día a todos aquellas personas que quieran encontrar el amor. Todas las noches, no son pocas las curiosas anécdotas que protagonizan sus comensales, despertando todo tipo de reacciones. Un ejemplo perfecto es uno de esta semana en el que Alex y Sandra, dos solteros.
El programa de Cuatro mostró a Sandra, una joven madrileña en busca de un hombre educado, cariñoso y maduro. Su cita fue Alex, un estudiante de Derecho natural de Bilbao, el cual se mostró bastante cortado.
Es más, el vasco no sintió ningún “flechazo” al ver a su cita. “Para mi gusto, no me ha parecido guapa”, reveló el comensal al equipo del formato. Sandra tampoco se sintió atraída por el joven, pero decidió darle una oportunidad: “La persona se lleva por dentro y no por fuera”, dijo.
Después de unas discretas presentaciones, los solteros pasaron a una mesa para dar paso a la cena. Lejos de intentar conocerse, Alex no puso de su parte, sin mostrar interés por la de Madrid. Mientras Sandra trataba de charlar y abrirse durante la cena, el bilbaino se limitaba a responder tímidamente.
El estudiante de Derecho argumentó su comportamiento ante las cámaras: “De primeras necesito conexión física. Si no, hablo lo mínimo, porque no me gusta”. Por otro lado, Sandra detectó la alta de interés: "Me he sentido incómoda. Todos los temas de conversación los sacaba yo”.
Más tarde, Sandra le preguntó a Alex qué le había parecido. Este fue sincero, asegurando que no sentía atracción física hacia ella, y ella respondió igual. Acto seguido, la madrileña fue un momento al aseo para hablar con su madre y contarle su desagradable experiencia.
Lo que no sabía la joven es que, en ese momento, el vasco iba a darle plantón. “Como no va a haber nada, prefiero irme”, avisó Alex a una de las camareras. Ante este gesto, la hostelera le preguntó si se despediría de Sandra: “No, ya lo hemos hablado y no le va a sentar mal porque nos acabamos de conocer”, dijo.
Sorpresa desagradable
Al regresar a su asiento, Sandra comprobó que el vasco no estaba en la mesa. Las camareras de ‘First Dates’ no tuvieron otro remedio que explicarle lo sucedido a la madrileña. Esta se quedó perpleja: “Nunca me han dejado tirada en una cita. Eso no se debe hacer. Me he sentido bastante humillada”, lamentó.
“No esperaba que me abandonara de esta manera, hubiera agradecido un poco más de madurez. Me ha parecido una ‘cerdada’”, zanjó Sandra. A pesar de este episodio, afirmó que estaría dispuesta a regresar al formato de citas en busca de una mejor experiencia.
