Inés Ballester vuelve a TVE para presentar ‘La mañana de verano’
Arrancan los castings de la segunda edición de ‘MasterChef Junior’, que busca niños de 8 a 12 años
madrid - La presentadora Inés Ballester vuelve a Televisión Española tres años después de su último trabajo en la cadena pública para ponerse al frente de La mañana de verano de La 1, el magacín matinal de la cadena pública para la temporada estival. Inés Ballester es una profesional con gran experiencia en televisión, medio al que dio el salto de la mano de TVE. Comenzó como cronista parlamentaria en el centro territorial de TVE en la Comunidad Valenciana. También trabajó en Informe semanal y estuvo al frente de magacines de la pública como Por la mañana, donde permaneció seis temporadas, entre 2002 y 2008, o El día por delante. También presentó Cine de barrio en La 1 junto a Carmen Sevilla en 2010. Su último trabajo en la cadena pública fue el espacio divulgativo de La 2 Sacalalengua en 2011, un viaje por el Estado en el que compartía con el público los secretos de las palabras de forma amena y divertida.
Coincidiendo con el 50 aniversario del inicio de las emisiones de Televisión Española en Canarias, el programa visitará en julio Gran Canaria. El reportero Roberto Herrera será el encargado de recorrer el archipiélago para mostrar a los espectadores sus diferentes rincones.
casting La magia y la diversión vuelven a las cocinas de MasterChef Junior. Ya está abierta la inscripción en rtve.es para participar en la segunda edición del concurso. El plazo para apuntarse en la web (http://www.rtve.es/television/masterchef-junior/casting/) terminará el 18 de julio. TVE busca niños de entre 8 y 12 años que sientan pasión por la cocina. Como en la anterior edición, los pequeños chefs se enfrentarán a pruebas de adultos, con recetas y retos que demostrarán que para cocinar poco importa la edad. El año pasado, Mario, Ana Luna, Juan, Esther, Aimar y el resto de sus compañeros revolucionaron las cocinas y demostraron que los niños también pueden ser grandes chefs.
El concurso potencia que los más pequeños vivan la cocina de una forma emocionante, positiva y divertida mientras aprenden y lo pasan bien. También fomenta el aprendizaje sobre la comida y los hábitos saludables. - DNA