TENERIFE. Para Évole, la redacción debe ser "una trinchera" con información contrastada sobre alguien "que no quiere que por algún motivo se publique algo", pues "debemos ser nosotros lo que marquemos lo que le interesa al ciudadano" y no al político y al directivo de un banco.

El periodista hizo estas manifestaciones durante una mesa debate tras recoger el premio Documental y Televisión de la VIII edición del Festival Internacional de Documentales Miradas Doc que se celebra cada año en Guía de Isora, Tenerife.

Ante más de 200 personas, Évole abogó por seguir luchando por hacer un periodismo de calidad comprometido con la información y con la ciudadanía.

"Cada vez estamos más informados y demandamos mayor información y esto quiere decir que el periodismo está vivo", subrayó.

"Que no se nos trate de imbéciles", advirtió, cuando "nos dicen que la televisión actual es la que demanda el público, pues el público es una cosa muy abstracta y la gente es muy diversa y le gustan las cosas bien narradas", precisó.

Para el conductor de Salvados, el espectador "es mucho más exigente de lo que pensamos, pues cada vez tiene más ganas de saber".

Sobre su trabajo en Salvados, Évole manifestó que en los inicios su equipo ha utilizado el humor para temas de actualidad, pero ahora prima el periodismo "con el barniz del humor", comentó.

"Nos sorprendió mucho que nos viese tanta gente y hemos estado en constante evolución", dijo Évole, aunque "es obligado que sea incómodo, incluso para mis jefes", matizó.

En el ADN del programa está "el riesgo", pues "es lo que debemos hacer si queremos hacer periodismo, intentaremos aprovechar el momento al máximo, con compromiso social, entrevistas intencionadas", manifestó.

Sobre la irrupción de Internet en el periodismo, dijo que es una realidad inevitable pero hay que dimensionarla, pues "no todo el mundo está pendiente del 'twitter'" y "por eso nada es tan importante".

La fórmula para seguir adelante con periodismo comprometido es no dormirse, pues "durante mucho tiempo hemos estado acomodados y mirando para otro lado, mucho periodismo de salón y muy cerca del poder".

"Debemos estar constantemente mirando al poder, pero con nuestros ojos, no con los que nos gobiernan", argumentó.

Évole animó a no perder "el espíritu crítico ni del periodismo ni del ciudadano", porque una sociedad bien informada "es una sociedad más inteligente, y abandonar eso es abandonarnos a nosotros".

"Es bueno que todos tengamos ganas de saber", concluyó.