Los cientos de familias de Castilla y León que han sido desalojadas de sus viviendas por los incendios forestales podrán recibir 500 euros de ayuda y hasta 185.000 euros en caso de que su casa haya sido destruida por las llamas.

Así se recoge en el plan de ayudas dotado con 100 millones y presentado este miércoles por el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco.

Además, incluyen partidas para pagar todas las facturas que presenten los ayuntamientos afectados por los incendios como consecuencia de actuaciones paliativas de los incendios forestales.