El precio medio de los carburantes ha proseguido esta semana su tendencia al alza tras encadenar ya su quinta semana consecutiva de subida en lo que va de verano. Tocando por tanto, el precio máximo en lo que va de 2023 en el caso de la gasolina, coincidiendo justo con la antesala del puente de agosto

La gasolina en concreto, se encuentra 1,82% más cara que la semana pasada, registrando un precio medio de 1,68 euros por litro, por lo que escala a su valor máximo desde la antepenúltima semana del año 2022, según datos del Boletín Petrolero de la Unión Europea.

Sin embargo, no es la gasolina el único carburante que se encuentra disparado, pues por su parte, el precio medio del diésel también encadena su quinta semana consecutiva de subidas, más del 3,4%, para alcanzar los 1,552 euros el litro, un nivel no marcado igualmente desde finales de marzo.

También en el caso del gasóleo, este marca su valor más alto desde los 1,546 euros/litro de finales del pasado marzo. 

Es por esto que tras estos nuevos repuntes, el precio de los carburantes supera también los niveles a los que ascendían antes del estallido de la guerra de Ucrania por la invasión rusa que comenzó el 24 de febrero de 2022 y que, en el caso del diésel, era de 1,479 euros por litro, y, para la gasolina, de 1,594 euros por litro. 

Esta continua subida en el precio de los carburantes se produce a escasas horas de que dé comienzo el puente de agosto, uno de los períodos vacacionales en el que más desplazamientos de vehículos por carretera se prevé en el año. De hecho, la Dirección General de Tráfico (DGT) estima más de 8,5 millones de desplazamientos a lo largo de cinco días. 

No obstante y pese a todo, en el caso de la gasolina y el gasóleo, ambos carburantes se mantienen lejos de los máximos que tocaron en torno a hace un año, cuando en julio la gasolina alcanzó los 2,141 euros y el gasóleo los 2,1 euros.

¿Cuánto cuesta llenar el depósito?

Con estos precios, el llenado de un depósito medio de 55 litros de diésel asciende actualmente a unos 85,3 euros, frente a los 103,9 euros, unos 18,6 euros más, que costaba a estas alturas el año pasado, incluyendo la bonificación mínima de 20 céntimos por litro de combustible para todos los ciudadanos, que se encontraba vigente hace un año, y que fue aprobada por el Gobierno de Pedro Sánchez, dentro de su plan de respuesta al impacto de la guerra de Ucrania.

En el caso de la gasolina, el llenado de un depósito medio de 55 litros supone actualmente unos 92,4 euros, unos once euros menos que los 104,5 euros que costaba en el mismo periodo de 2022.

Y es que el precio de los carburantes depende de múltiples factores, como su cotización específica (independiente de la del petróleo), la evolución del crudo, los impuestos, el coste de la materia prima y de la logística y los márgenes brutos. Además, la evolución en la cotización del crudo no se traslada directamente a los precios de los carburantes, sino que lo hace con un decalaje temporal.

Más barato en el territorio español

Con estos niveles, el precio de la gasolina sin plomo de 95 se mantiene en el territorio español por debajo de la media de la Unión Europea, situada en 1,801 euros el litro y de la eurozona, con un precio medio de 1,861 euros. En el caso del diésel, el precio en el territorio también es inferior al de la media de la UE, que es de 1,689 euros, y de la zona euro, donde marca un precio de 1,725 euros.