Lejos de ser una infección en remisión, más propia de otras épocas, la sarna repunta en Euskadi y Osakidetza extrema la vigilancia ante la proliferación de casos. La escabiosis o sarna es una infección parasitaria de la piel causada por ácaros con una incidencia creciente sobre todo entre los más jóvenes. De hecho, el Servicio Vasco de Salud atiende cada mes cerca de mil consultas con este problema y ha registrado un aumento de casos de sarna en Donostia, al tiempo que en el resto de territorios también se han producido en los últimos tiempos oleadas puntuales.
Dermatólogos guipuzcoanos constatan que, tras la pandemia “vemos un aumento exponencial. Y no hay semana que no acuda un paciente con sarna”, ha asegurado Miren Markina. El confinamiento provocó el contagio familiar, y luego se ha evitado ir al médico por un picor en la piel. A lo que se suma la falta de detección posterior.
Pero el problema ya se había evidenciado mucho antes. Y el pasado mes de octubre, Osakidetza reforzó el protocolo de rastreo para controlar la sarna, debido al aumento de las consultas. Previamente se había alertado a los médicos de Atención Primaria para que estuvieran vigilantes “ante el incremento sustancial de brotes de escabiosis”. Así, solo en el primer trimestre de 2022, los servicios asistenciales públicos atendieron 1.200 consultas relacionadas con esta enfermedad, frente a las 3.000 de todo el 2021.
Por ello, el rastreo, realizado por los mismos encargados de monitorizar el covid, puso en marcha un proyecto piloto para vigilar la sarna en la OSI Barakaldo Sestao, que fue ampliada al resto de organizaciones sanitarias.
Cualquiera puede contagiarse de sarna, bien por contacto piel con piel durante al menos 15 o 20 minutos, así como si toca objetos de un infectado como ropa, toallas, la ropa de cama etc...
El protocolo diseñado por Salud presta atención, además del tratamiento al paciente que presenta el problema, a su círculo de convivencia, para atajar la diseminación de la enfermedad. Asimismo, hace hincapié en la coordinación entre la Atención Primaria y los especialistas en Dermatología, con los servicios sociales de base “ya que en muchas ocasiones la ocurrencia de escabiosis se asocia a alguna problemática social”.
Seguir bien el tratamiento
Esta semana ha sido el Ayuntamiento de Donostia, el que ha puesto en marcha una campaña de información sobre la sarna al haber apreciado “especialmente por las consultas en ambulatorios y farmacias, que la ciudadanía acude a los mismos pidiendo remedios ante la proliferación de picores cuya causa está relacionada con un aumento en las tasas de incidencia de esta enfermedad”.
Los expertos destacan que lo más importante es hacer bien el tratamiento y que lo deben realizar todos los convivientes. “Consiste en aplicarse un crema desde el cuello hasta el dedo gordo del pie. Y hay que llevarlo a cabo todos a la vez porque si el grueso de la familia lo hace hoy, pero la amama lo hace pasado mañana, y mañana está en contacto con los nietos infectados, todo se va al traste”, subrayan.
Sin embargo, este ácaro está mostrando resistencia en algunos casos a la crema que se usa comúnmente. No obstante, las voces expertas insisten en que no es un problema, ya que existen otros tratamientos como, por ejemplo, algunos que pueden tomarse por vía oral que acaba con los ácaros y con los huevos. l
El retorno de la enfermedad: se multiplica por siete en diez años
- Un ‘boom’. Los casos de sarna se han multiplicado por siete en la península en la última década. En 2020 se asoció al confinamiento pero desde entonces siguen al alza, sin que los dermatólogos sepan las causas reales. Sí están seguros de que el fenómeno es cíclico, y se repite desde que se tuvo conocimiento de la enfermedad, hace cientos de años. “Va por olas: hay temporadas en las que hay más casos y temporadas en las que hay menos”, precisa Cristina Galván, dermatóloga y vicepresidenta de la Alianza Internacional por el Control de la Sarna. Según el Ministerio de Sanidad, el aumento de recetas de cremas para combatir el problema ha ido in crescendo, y en 2022 se dispensaron más pomadas de este tipo que en ningún otro año.
¿En qué consiste?
- Contagio
- Por contacto. La sarna, también llamada escabiosis, es una enfermedad cutánea provocada por el ácaro parásito ‘Sarcoptes scabiei’ o arador de la sarna. Es muy contagiosa por contacto.
- Seis semanas
- Contagio en diferido. Tras el contacto, pueden pasar entre cuatro y seis semanas hasta que empiezan los síntomas. Durante este periodo sin síntomas, también se puede contagiar.
- Picor intenso
- Síntomas. El síntoma más habitual es un picor intenso, más frecuente por la noche y entre los dedos de manos y pies, muñecas, codos, abdomen, muslos, zona genital y debajo de pliegues como axilas o glúteos.
- Sin clases
- Afección. Antes, la sarna se asociada a personas de clase baja, en exclusión social, o espacios como las cárceles, pero, actualmente, afecta a cualquiera.