El fantasma del ébola, una enfermedad con una letalidad del 40%, ha recorrido hoy Euskadi, tras el ingreso y aislamiento de una paciente en el Hospital Donostia, aquejada de fiebre hemorrágica.

Casi 10 años después del primer caso de ébola en el Estado, el de la enfermera Teresa Romero, Osakidetza activaba el protocolo del ébola ante un caso con un cuadro de síntomas compatibles con este virus letal. Se trata de una mujer trasladada de madrugada desde el hospital de Urduliz que ingresó a las siete y media de la mañana en la Unidad de Alta Seguridad Biológica del Hospital UniversitarIo Donostia, en la que se aísla a los pacientes con enfermedades infecciosas graves. 

Sin embargo, a la una del mediodía, el Servicio Vasco de Salud consideraba poco probable que se tratase de este virus y se apresuró a aclarar que la paciente está “estable” y “no se teme por su vida”. Aunque Osakidetza no ofrece datos personales de los pacientes al tratarse de una información confidencial, se conoce que se trata de una antropóloga, de 54 años de edad, que habría viajado recientemente a la República Centroafricana.

Dada la alarma suscitada, el subdirector médico de la OSI Donostialdea de Osakidetza, Xabier Zubeldia, ha aclarado, a las puertas del hospital, que la paciente aislada sufre una “infección tropical”, pero considera “improbable” que se trate del ébola o el virus de Marburgo o de una malaria grave, “por cómo está la paciente”, el tiempo de evolución que lleva y las pruebas que ya le han practicado.

UNA INFECCIÓN SERIA

Zubeldia precisó que la paciente no está grave y “en este momento” no se teme por su vida, pues su situación es “estable”.

El especialista explicó que cómo sufre “una infección que puede llegar a ser seria, por si acaso”, han decido activar el protocolo de seguridad e internarla en la unidad de aislamiento “de alto nivel” de este hospital.

Aunque “en medicina nunca se puede decir nada al cien por cien”, lo cierto es que la posibilidad de que sea un caso de ébola “la tenemos ya casi descartada”, ha remarcado.

La unidad donde está la paciente cuenta con un equipo de trabajo para infecciones tropicales integrado por anestesistas, intensivistas e infectólogos.

En cuanto al diagnóstico que barajan, ha señalado que aún están a la espera de los resultados analíticos de varias “muestras” que han enviado a analizar, tanto al Instituto de Salud Carlos III de Madrid, como a los laboratorios propios del hospital donostiarra.

NO TODO ES ÉBOLA

El facultativo ha asegurado que “son muchas las enfermedades” que barajan, desde “una fiebre hemorrágica, que quizá podría ser lo más grave o serio”, a otro tipo de infección “más banal” de la que podría curarse con los antibióticos que ya le están administrando. “El diagnóstico diferencial es muy amplio” y “hay que esperar”, insistió.

Y es que, afortunadamente, no todos los virus que llegan de África son ébola ni Marburgo, los más peligrosos. Hace una semana, el Ministerio de Sanidad también descartó la presencia de virus de Marburgo en una paciente sospechosa ingresada en el hospital santanderino de Valdecilla que había regresado recientemente de Guinea Ecuatorial, así como de otros como ébola y lassa.

También esta mujer presentaba fiebre, vómitos y cefaleas, síntomas compatibles con esta enfermedad, que finalmente fue descartada por el laboratorio del Centro Nacional de Microbiología de Majadahonda.

SIN RIESGO PARA LA POBLACIÓN

Osakidetza aclara que se está siguiendo el protocolo establecido y "se está teniendo en cuenta si hay contactos qué hay que hacer con ellos desde Salud Pública". "Estamos tranquilos, no es una situación de riesgo para la población, vemos que la situación en este momento está estable y controlada", se remarca.

De hecho, las personas que han estado en contacto con la enferma lo saben y permanecen aisladas en sus casas, hasta que se conozca el resultado definitivo de los análisis que puede ser mañana mismo o dentro de varios días.

La paciente inicialmente fue trasladada al hospital de Urduliz y, desde allí, al centro hospitalario de la capital guipuzcoana, donde se encuentra en la Unidad de Alta Seguridad Biológica destinada a pacientes con enfermedades infecciosas graves. Esta mujer había estado en la República Centro Africana y ayer a la noche es cuando acudió al hospital vizcaino para, posteriormente, ser evacuada esta misma madrugada al hospital Donostia.