- “Olaaa, k tal?”, “te hecho de menos” o “asta luego, bss” son mensajes cada vez más comunes en las redes sociales o en los grupos de mensajería instantánea de niños y adolescentes. Los errores gramaticales y las faltas de ortografía se han convertido en una tara de los nativos digitales que luego se reflejan en los exámenes y en los ejercicios de clase para desesperación de sus profesores. La confusión entre a ver y haber, el olvido de tildes y signos de puntuación, el intercambio de letras que suenan igual y la abreviatura de palabras, a imagen y semejanza de los mensajes de texto. Estas son algunas de las diez faltas de ortografía más frecuentes que ha detectado Cuadernos Rubio, la editorial valenciana desde hace 65 años tiene como objetivo hacer fácil lo difícil.
Muchos de los jóvenes, al no estar tan familiarizados con la escritura a mano, se guían por el código oral y escriben tal y como suenan las palabras. “Si a ello le sumamos la inmediatez de la escritura en redes sociales y el uso del autocorrector en los dispositivos digitales, nos encontramos con niños y jóvenes con un dominio menor de las reglas ortográficas”, advierten los expertos y pedagogos de esta veterana editorial de cuadernillos didácticos.
La editorial atribuye los errores a “la vorágine” de ser los primeros en publicar un tuit o una entrada en Instagram y recomienda fomentar la lectura como la mejor manera para evitar atentar contra las reglas de ortografía básicas. También aconseja tomarse un tiempo para repasar lo que se escribe en las redes y dejar una buena impronta.
Estos son algunos de errores más habituales hoy en día. En primer lugar la editorial coloca la confusión entre a ver y haber, “un clásico en palabras homófonas que se pronuncian igual pero se escriben de forma distinta”, explican. En segundo lugar está el uso incorrecto de la h. Desde Rubio indican que la letra h “es otra de las grandes olvidadas” pero apuntan que la forma correcta es “echar de menos” y no “hechar de menos”. En cuanto al verbo haber, antes de cada participio siempre lleva h, por ejemplo “ha hecho” o “ha comido”, pero la a irá sola cuando funcione como una preposición, por ejemplo “se va a su casa” y no “se va ha su casa”. Otro error común es ignorar los signos de puntuación, tanto los de interrogación o exclamación al principio de la frase como los puntos, comas, paréntesis o comillas.
Algo que brilla por su ausencia son las tildes. Los usuarios olvidan añadir “por comodidad o rapidez” las tildes, un elemento cuya presencia puede determinar el significado de una frase. También se suelen olvidar las tildes en los pronombres exclamativos e interrogativos, y se escribe “¿cual ha sido el proyecto ganador?” en lugar de “¿cuál ha sido el proyecto ganador?”. Un consejo, Rubio recomienda no abusar de la j cuando simulamos que nos reímos en un mensaje. Y es que “jajajajaja” no es lo mismo que “jajjjajajajajaj”. En caso de duda, nunca falla un emoticono de carita sonriente. l
l Consejos. Uno de los errores ortográficos más habituales que no podía faltar en el decálogo diseñado por Cuadernos Rubio es el mal uso del por qué, porque y porqué, que todavía puede agravarse más al abreviar la palabra a un xp. También se usan otras abreviaturas de forma incorrecta. Las más frecuentes son usar q en lugar de que, tmb para sustituir a también y sq remplazando es que. Por otro lado, es común usar la forma en infinitivo cuando se habla en imperativo, por lo que en Rubio recuerdan que lo correcto es “¡cerrad la puerta!” y no “¡cerrar la puerta!” Rubio recomienda utilizar las mayúsculas únicamente cuando se quiere poner énfasis al mensaje y, por contra, recuerdan que los nombres propios y los inicios de frase empiezan siempre por mayúscula. Otro error habitual en redes sociales es utilizar la letra k en lugar de la letra c, o sustituir las elles por íes griegas, dos fallos que se comenten principalmente por “ahorrar tiempo”.