- El Gobierno de Reino Unido anunció ayer que prohibirá las terapias de conversión para las personas homosexuales o bisexuales, pero no para las personas transgénero, tras varias filtraciones a la prensa inglesa sobre un posible cambio de opinión con respecto al veto de estas prácticas. Las terapias de conversión intentan cambiar o suprimir la sexualidad o la identidad de género de una persona. El primer ministro británico, Boris Johnson, y su predecesora Theresa May habían prometido hacerlas ilegales durante sus mandatos, según informó el periódico The Guardian.
Sin embargo un portavoz del Gobierno de Reino Unido dijo que se estaban estudiando formas de impedirlas mediante la legislación vigente y “otras medidas no legislativas”. Además, se filtró un documento de Downing Street a ITV News, en el que se detallaba que el primer ministro había acordado “no avanzar en la legislación” para prohibir estas prácticas de conversión.
El anuncio de la posible declinación de la prohibición de las terapias de conversión creó una gran polémica en el país. Tras el escándalo, el periodista de ITV News, Paul Brand, publicó en su perfil de Twitter que el primer ministro, Boris Johnson, había “cambiado de opinión a raíz de la reacción al informe”. Brand, citando a una fuente gubernamental de alto nivel, aseguró que la legislación se incluirá en el discurso de la Reina en mayo.
