La Policía Nacional y la Guardia Civil han desarrollado una operación conjunta que ha concluido con la desarticulación en Jimena de la Frontera (Cádiz) de una organización criminal que se dedicaba a realizar estafas telefónicas a numerosas víctimas de todo el territorio nacional, algunas de ellas en el País Vasco.
Según ha informado la Policía en un comunicado, todas las estafas se han producido haciendo uso de la técnica conocida como "phising", mediante la cual los detenidos creaban y enviaban a las víctimas correos electrónicos simulando la apariencia de portales bancarios oficiales de una determinada entidad, solicitando las credenciales de acceso a sus productos bancarios.
De esta forma, obtenían la información necesaria para acceder a las cuentas bancarias de las víctimas y poder realizar transferencias bancarias a otras cuentas que pertenecían a distintos miembros de la organización.
Todos los miembros del grupo criminal residían en Jimena y estaban organizados de tal manera que cada uno desarrollaba una tarea concreta en la comisión de los delitos, dificultando así su investigación.
Según esta división de tareas, había dos subgrupos claramente diferenciados. Por un lado estaban las denominadas "mulas de dinero" o "drops", personas que ponen sus cuentas bancarias a disposición del grupo criminal para recibir las transferencias bancarias procedentes de las cuentas de las víctimas.
Por otro lado, se encontraban los "captadores de mulas", cuya función era la captación de personas que accedieran a realizar esta función.
La investigación se inició en abril de 2021, cuando se detectaron varias denuncias con características similares en la zona del Campo de Gibraltar. A partir de ese momento, las unidades de investigación de Guardia Civil y Policía Nacional sumaron esfuerzos para identificar plenamente a los integrantes del grupo, evidenciar su manera de actuar, así como detectar a todas las posibles víctimas afectadas por esta estafa.
En total, se han localizado quince víctimas repartidas por todo el territorio nacional en comunidades como Madrid, Cataluña, Euskadi o la Comunidad Valenciana, siendo más de 36.000 euros la suma de todo el dinero estafado.
La operación se ha saldado con la detención de diez personas y la investigación de otras cuatro que integraban este grupo criminal, así como la realización de un registro domiciliario en la localidad de Jimena de la Frontera.
La investigación continúa abierta y no se descartan nuevas detenciones, mientras los detenidos han sido puestos a disposición de la autoridad judicial, que ha decretado el ingreso en prisión de los dos principales responsables de la organización.