- Nueve de cada diez ciudadanos de Euskadi, el 90%, se muestran muy o bastante satisfechos con la vida que llevan. La satisfacción con la propia vida es algo mayor ahora que en los años precedentes y, además, es también mayor en Euskadi que la media europea. El estudio realizado por el Gabinete de Prospección Sociológica del Gobierno Vasco se ha centrado en analizar la percepción de la población vasca sobre el bienestar propio, junto con un intento de identificar las variables explicativas del bienestar y la felicidad.
En la escala de bienestar, teniendo en cuenta que 0 es la “peor vida posible” y 10 “la mejor”, la ciudadanía vasca se coloca en un 7,1 sobre 10. Comparando estos datos con los del Informe sobre la felicidad publicado por Naciones Unidas, World Happiness Report, Euskadi se colocaría en el puesto 13, tras países como Finlandia (7,9), Islandia (7,6), Dinamarca, Suiza y Países Bajos (7,5). España estaría en el puesto 24 y Francia en el 20.
Además, la población vasca tiene una percepción positiva en relación al futuro con 7,6 sobre 10, esto es, cinco décimas por encima de la percepción sobre la situación actual. Combinando la percepción actual con las expectativas de futuro, el 45% cree que su situación va a mejorar a cinco años vista, el 29% cree que se va a mantener en el nivel actual y el 19% que su situación puede empeorar. El 71% de la población vasca tiene confianza en el futuro.
La encuesta destaca que sentirse bien emocionalmente la mayor parte del día está íntimamente relacionado con la sensación de bienestar de la población. Así, se observa un aumento de un punto en la media de bienestar entre las personas que afirman que se sintieron bien la víspera (se sintieron respetadas, a gusto o se rieron mucho). La correlación directa entre el bienestar y la sensación de felicidad también es muy elevada (0,6 sobre 1). Haber tenido la víspera emociones negativas se correlaciona significativamente con un menor nivel de bienestar (en torno a un punto menos); haberse sentido preocupado, triste, solo o enfadado influye de forma negativa en nuestro nivel de bienestar.
También la “confianza en el futuro” se relaciona directamente con el bienestar de la población, de forma que la diferencia en bienestar entre quienes muestran total confianza en el futuro (7,8) y quienes no muestran ninguna confianza (6,0) es de casi dos puntos. La población vasca valora su estado de salud con un 7,3 sobre 10. El nivel de satisfacción es del 7,5 sobre 10, si bien ha bajado unas décimas desde 2013 (era del 8,2).