- Gonzalo Martín, tío abuelo de Álex, el niño de nueve años asesinado la semana pasada en la localidad riojana de Lardero aseguró ayer que la muertes del pequeño “se podía haber evitado”. Martín acudió en nombre de la familia a la concentración celebrada ayer en el parque de donde se llevó el infanticida al niño y expresó el “agradecimiento eterno” de la familia por el apoyo ciudadano mostrado estos días.
El tío abuelo indicó que los padres de Álex, quien tenía un hermano, “están matados”, al igual que los abuelos, quienes se sienten “derrotados”. Recordó al pequeño “como un encanto de niño, una preciosidad, cariñoso, dinámico, alegre, hacía teatro y le gustaba mucho Halloween”, de hecho, el día de su muerte estaba disfrazado de la “niña del exorcista”. “No era un niño confiado y tenía fobia a los perros”, desveló, por lo que ha descartado que fuera engañado con su presunto homicida para ver unos pajaritos u otros animales.
“Fue todo en cuestión de un minuto. Sus padres estaban en todo momento pendientes de sus hijos, no se lo llevó por un despiste de sus padres, que están totalmente dedicados a sus dos hijos”, indicó.
Precisó que la familia de Álex vive en otra zona de Lardero, situada a unos dos kilómetros, por lo que no eran conocedores de que había habido intentos de rapto de niñas en esa zona los días anteriores, según explicaron varios testigos tras el crimen. “Tenía solo 9 años, pero Álex se nos ha ido como un hombre porque ha luchado contra un asesino y ha perdido la batalla”, agregó. Martín dijo que no se sabe cuándo se podrá celebrar el funeral del pequeño porque se ha declarado secreto de sumario.
El hombre de 54 años detenido por la muerte de este niño y que estaba en libertad condicional desde 2020 pasó ayer a disposición del Juzgado de Instrucción número 2 de Logroño, cuya titular decretó su prisión provisional comunicada sin fianza y fue trasladado al centro penitenciario de la capital riojana como presunto autor del homicidio. En declaraciones a los periodistas, Martín subrayó que este “asesinato” se podría haber evitado, porque, en los 19 meses que han pasado “desde que este individuo salió de la cárcel, la justicia podría haber hecho algo”.
“No se puede dejar en la calle a un asesino después de matar a una agente inmobiliaria y violar a una niña de 13 años. Este hombre tendría que estar en la cárcel de por vida”, recalcó. “A nuestro Álex no nos lo van a devolver, pero queremos que se pudra en la cárcel y no salga jamás”, concretó. También censuró que, por “buen comportamiento”, el presunto autor del homicidio de su sobrino nieto disfrutó de 39 permisos penitenciarios durante su última condena, en los que podría haber cometido algún crimen similar.
“Con este asesino suelto le ha tocado a mi sobrino, pero le podría haber tocado a cualquier niña porque también intentó llevarse a algunas”, lamentó. Por ello, urgió al Ministerio del Interior a “solucionar” este tipo de crímenes para que Álex “sea el último y no haya más”. Ayer el ministro Fernando Grande-Marlaska, afirmó que todas las instituciones implicadas se han atenido “al principio de legalidad” y además “han trabajado como han entendido razonable”.