La certeza sobre cuándo se alcanzará la inmunidad de rebaño ha desaparecido. Si hace tres o cuatro meses el gran objetivo de todas las autoridades sanitarias era tener vacunada en agosto al 70 % de la población para frenar la transmisión del virus, esa esperanza se ha volatilizado. Los cálculos han sido reformulados por distintas sociedades científicas y los expertos creen que habría que elevar el porcentaje hasta el 85 o el 90 %.

En siete meses de campaña, Euskadi ha aplicado la pauta completa del antídoto contra el covid-19 a algo más de 1.224.600 personas, el 62 % de la población diana. Y es que desde el viernes pasado, se incorpora la franja de edad de 12 a 15 años (un total de 87.126 adolescentes) que hasta ahora no se contemplaba en las estadísticas ya que no eran vacunados, pero que ya han cogido sus citas.

Por lo tanto, pasar a ese mencionado 85 % implicaría tener inmunizadas a algo más de 1.700.000 vascos mayores de 12 años. Según los últimos datos facilitados por Osakidetza, hay 225.860 vascos que tienen anticuerpos porque han pasado la infección.

Y es que el cálculo inicial del 70 % prácticamente ha sido descartado al no tener en cuenta el efecto de las nuevas variantes. Al parecer, la mítica cifra del 70 % se fijó en base al coronavirus original, el de Wuhan, pero las mutaciones han alterado la evolución de la pandemia. “Llegó la variante británica, entre un 40 y un 60 % más infectiva y ahora la delta que se estima que es otro 50% más transmisible. Eso hace que el número de gente inmunizada necesario se elevaría hasta el 85 %”, explica Francisco Tejerina, especialista en Enfermedades Infecciosas.

Muro defensivo

De hecho, casi todos los epidemiólogos consideran ya muy poco probable que el 70 % de población vacunada tenga el efecto de conseguir ser un muro defensivo contra el coronavirus. “El concepto de inmunidad de rebaño no está basado en una cifra concreta, el 70 % hace referencia a lo visto en otras infecciones, pero aquí pueden darse situaciones en las que se requiera bastante más”, plantea el epidemiólogo y exdirectivo de la Organización Mundial de la Salud, Daniel López Acuña.

En Catalunya, ya han admitido abiertamente que tendrán que vacunar más. Ante la incidencia de la variante delta, la secretaria de Salud Pública de la Generalitat, Carmen Cabezas, subrayó que el 70 % es la cifra clásica, pero con una variante tan transmisiva como la delta se puede ir a niveles del 90 %, entre vacunados y personas que ya han pasado la infección”.

No llegará en agosto

Por eso la inmunidad de rebaño ya no llegará en agosto. Luis Enjuanes, director del laboratorio de coronavirus del Centro de Biotecnología del CSIC, cree que no se alcanzará hasta otoño, a pesar de que la vacunación va “bastante bien”. Durante una entrevista en RAC-1, el virólogo precisó, que “se deberá superar el 80 % de inmunidad de grupo para poder estar tranquilos. Y esto no lo alcanzaremos hasta octubre o noviembre”, aseguró .

Gracias a esa inmunidad de grupo incluso las personas que no han enfermado o que no han accedido a una vacuna “reciben cierto grado de protección porque la enfermedad contagiosa se contiene”, mantienen los expertos.

Otro factor determinante es la falta de vacunas completamente esterilizantes que, además de proteger de la enfermedad, eviten su transmisión. La viróloga de cabecera de esta pandemia, Margarita Del Val, cree que la inmunidad de rebaño solo “solo se puede conseguir con vacunas que además de proteger contra la enfermedad, eviten que las personas vacunadas que se encuentren con el virus se infecten y multipliquen el virus. Y esto es algo que no ocurre con ninguna de las vacunas actuales”.

Así, Del Val considera que la inmunidad “se puede lograr cuando los vacunados son seguros, y los vacunados no son seguros”. La científica insiste en la necesidad de que las personas que ya han sido inoculadas continúen manteniendo las medidas de seguridad. “Ellos pueden quitarse la mascarilla sin miedo a enfermar, pero no son seguros para sus contactos”.

Todo ello sin tener en cuenta que llegar al 70 % de población vacunada deja a un tercio sin inmunizar, entre los que habría que contar, no solo a aquellos a los que no le ha llegado el momento por la estrategia de vacunación sino también a quienes no se quieren poner la inyección. Un número que, afortunadamente, en Euskadi es pequeño y se estima en apenas dos de cada cien personas.

Al comienzo de la pandemia, había cierto consenso científico en situar la inmunidad de rebaño en torno al 70 % de la población vacunada. Estos cálculos matemáticos se hicieron en base al R0 o número básico de reproducción, que indica la tasa de transmisión del virus, que estimaba que, de media, cada persona infectada puede contagiar a otras tres. Pero con el paso de los meses y la aparición de nuevas variantes, este umbral ha ido ampliándose hasta el 85 % sobre todo por efecto de la cepa delta -presente en siete de cada diez casos que se detectan en Euskadi- que ha provocado una explosión de infecciones ya que es bastante más contagiosa, y además, tiene un período de incubación más corto.

87.731 vascos

En este colectivo el 97 % tiene toda la pauta.

162.564

Las dos dosis del fármaco alcanzan a entre el 95 y 96 % de esta franja.

162.935

Los más rezagados de Astra Zeneca se han puesto la segunda dosis este fin de semana.

487.440

Aquí hay más disparidad. Y el 87% de cincuenta tiene ya las dos dosis mientras que entre los sexagenarios baja al 68,4 %.

599.061

La pauta completa oscila entre el 27 % de los treintañeros, y más del 78 % en los de 40.

278.276

Empezaron a vacunarse el pasado día 20.

87.126

Han sido los últimos en incorporarse al calendario de vacunación y están cogiendo cita desde la semana pasada.