Los trabajadores sanitarios con covid persistente denuncian que el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) sigue sin considerar su dolencia como enfermedad profesional, a pesar del compromiso en este sentido adquirido por el Gobierno español en febrero. En un comunicado, el Consejo General de Enfermería estima que hay unos 11.000 sanitarios afectados, dos mil de ellos con gran incapacidad, que sufren síntomas como cansancio extremo, dolores de cabeza, crisis epilépticas y dificultad respiratoria, entre otros.
En la práctica el INSS cataloga el covid persistente como enfermedad común, pese a que el Gobierno español se comprometió hace meses a que los casos de esa dolencia en sanitarios serían considerados como enfermedad profesional. El Consejo de Enfermería insiste en que debe ser catalogada de enfermedad profesional para, entre otras cosas, realizar su seguimiento y control a lo largo de toda la vida por parte de los servicios de prevención y riesgos laborales.
Uno de los problemas que denuncian los profesionales afectados es que se están dando casos de despidos en los centros sanitarios. En otras ocasiones se deniega al afectado un cambio a un puesto más acorde a su situación física actual. Por ello es clave que haya una adaptación de puestos de trabajo para los profesionales afectados. Asimismo, desde el Consejo recuerdan que gran parte de estos profesionales contrajeron la enfermedad ejerciendo su labor, sin mascarillas ni EPIS en los primeros momentos. "Somos ancianas atrapadas en el cuerpo de una enfermera de 40 años", denuncian algunas de las afectadas.
De hecho, las autoridades sanitarias no han aprobado todavía el protocolo de atención para este tipo de pacientes a pesar de que la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG) publicó hace varias semanas una guía clínica para guiar a los profesionales en el diagnóstico y tratamiento de estas personas, que en ocasiones se enfrentan al desconocimiento y la incomprensión. La SEMG definió el covid persistente como "un complejo sintomático multiorgánico que afecta a aquellos pacientes que han padecido covid (con diagnóstico confirmado o sin él) y que permanecen con sintomatología tras la fase aguda de la enfermedad, más allá de las primeras 4/12 semanas, persistiendo en el tiempo, una vez descartadas secuelas u otras posibles patologías causantes".
Según una investigación sobre la prevalencia de los síntomas, las complicaciones y el tratamiento del covid prolongado, la presencia de más de cinco síntomas de covid-19 en la primera semana de la infección se asocia significativamente con el desarrollo del covid persistente, independientemente de la edad o el sexo. Los investigadores identificaron dos grupos principales de síntomas: los que incluyen exclusivamente fatiga, dolor de cabeza y afecciones respiratorias, y los que presentan afecciones multisistémicas y fiebre.