La consejera de Salud, Gotzone Sagardui, ha alertado de que la situación de la pandemia en Euskadi es "muy preocupante" y de que si la tendencia ascendente se mantiene Osakidetza deberá "priorizar" y posponer intervenciones quirúrgicas.
En su comparecencia semanal para informar de la situación de la pandemia, ha asegurado que en este momento es posible mantener actividad asistencial ordinaria y dar una "atención adecuada", pero ha advertido de que habrá que tomar medidas si la incidencia sigue creciendo, aunque siempre con la premisa de "mantener la atención a todo lo urgente".
La covid-19 ha dejado 1.003 contagios en las últimas horas el número más alto desde el pasado 3 de febrero y la tasa de positividad ha escalado al 8,9 %. La situación en las ucis es "especialmente preocupante" con 133 enfermos de covid. La ocupación en unidades intensivas supera el 81 % y de ellos casi la mitad, el 48 %, tienen coronavirus.
El plan de contingencia de Osakidetza contempla 5 escenarios y ahora está en el tercero con 331 camas habilitadas, aunque hay capacidad de llegar hasta 600, si "lamentablemente" fuera necesario. Ese escenario también obligaría a "priorizar las intervenciones quirúrgicas" porque son las que más camas uci requieren, pero también habría que reorganizar el resto de la atención sanitaria no urgente.
Ha apelado a la "responsabilidad personal" para cumplir con las medidas sanitarias, que "ya son estrictas de por sí", al tiempo que ha recordado que hay un seguimiento diario de la pandemia y que las medidas están en permanente revisión.
La consejera ha puesto en valor el trabajo de los rastreadores de Osakidetza después de que los grupos de la oposición hayan cuestionado que solo se conozca el 50 % de los contagios. Ha negado este extremo y ha explicado que la mitad de los infectados son identificados antes de tener síntomas por ser contactos estrechos de otros contagiados, algo que es "fruto" de esa labor de rastreo.
Otro 30 % de casos se detectan en PCR practicadas a raíz de tener síntomas y en otros casos los positivos aparecen en los cribados o en los test diagnósticos que se hacen antes de someterse a una prueba hospitalaria.
Sagardui se ha referido también a las variantes del coronavirus. La cepa británica representa alrededor del 80 % de los casos y puede afirmarse que "ha sustituido de alguna manera al virus original". Menor presencia tienen la variante brasileña, con un total de 57 casos, la sudafricana con 26 y la nigeriana con 1. Las vacunas disponibles son válidas contras estas cepas, ha asegurado.
Sobre las reinfecciones, la consejera ha asegurado que no son significativas y que no se pueden sacar conclusiones porque son muy pocos casos. Además se desconoce cuánto dura la inmunidad tras la vacuna, aunque sí se estima que la protección tras haber pasado la enfermedad ronda los seis meses.
A Sagardui le "preocupan las dudas" sobre AstraZeneca y Janssen
La consejera de Salud, Gotzone Sagardui, ha admitido que le "preocupan las dudas que generan los casos adversos relacionados con las vacunas de AstraZeneca y Janssen", al tiempo que ha defendido que es "común" que haya este tipo de reacciones cuando un medicamento se administra "a millones de personas".
Ha argumentado en este sentido que es "imposible conocer y prever toda la variedad de antecedentes y circunstancias, así como los estados de salud diferentes" de cada persona que recibe una vacuna cuando esta se inocula de forma masiva.
"La cuestión es si solo vamos a seguir adelante cuando tengamos la evidencia de riesgo cero o como aconsejan las agencias de medicamentos aceptamos que el beneficio es infinitamente mayor al riesgo", ha dicho durante su comparecencia semanal en el Parlamento para informar de la evolución de la pandemia.
Se trata de un "debate científico que tiene consecuencias prácticas" como demuestra que siga "en el aire" qué hacer con las personas menores de 60 años que han recibido la primera dosis de AstraZeneca tras la decisión del Consejo Interterritorial de Salud de limitarla a la franja de 60 y 65 años después de que la Agencia Europea del Medicamento estableciera como "efectos secundarios muy raros" los coágulos en sangre.
Existen tres opciones: un segundo pinchazo de AstraZeneca (lo que recomienda la propia farmacéutica), no aplicar la segunda dosis y quedarse con la inmunidad que otorga la primera, o inocular otra marza en ese segundo pinchazo. Una decisión, ha recordado la consejera, que corresponde a la Comisión de Salud Pública.
El preparado de Janssen aún no ha comenzado a administrarse en Euskadi debido a que ayer Johnson & Johnson anunciara la suspensión del reparto de esta vacuna en Europa tras la suspensión cautelar de las autoridades en Estados Unidos por varios casos "raros y graves" de coágulos.
Esto ha dejado a Euskadi sin las 6.850 dosis que iba a recibir hoy mismo (en total en abril estaban previstas 13.700), "un nuevo obstáculo" en la planificación a corto plazo de la vacunación, que hasta la fecha "está funcionando", ha añadido Sagardui.
"Osakidetza tiene capacidad para vacunar todo lo que llegue y el mantenimiento de una reserva para garantizar las segundas dosis ha sido un acierto porque nos ha permitido que nadie se haya quedado sin ella", ha expuesto la consejera.
En los próximos días se continuará vacunando al colectivo de personas de alto riesgo, es decir personas trasplantadas o en lista de espera para ello; personas en tratamiento renal, con cáncer, con inmunodeficiencias primarias y personas con síndrome de down de 40 o más años.
De manera paralela seguirá la inoculación en función del criterio de edad con las personas de entre 70 y 79 años (Pfizer) y de entre 60 y 65 años (que reciben AstraZeneca).
Estas personas reciben un sms en sus teléfonos con un enlace para pedir cita por internet, aunque en ocasiones se les llama por teléfono si hay que cubrir huecos o no consta un número de móvil. Este sistema online "está funcionando bien y está ayudando a canalizar las citas de un colectivo muy amplio", ha remarcado.
"El factor limitante es la disponibilidad de dosis" y por ello si los viales disponibles de agotan se cierra el sistema de citas hasta que llegan nuevas remesas, momento en que se avisa de que ya se puede volver a pedir hora, ha explicado Sagardui.