Tras más de un mes de cierre, la hostelería reabrirá este sábado en Euskadi en medio de una gran expectación. Sin embargo, es muy importante cumplir estrictamente las restricciones impuestas desde el Gobierno vasco para minimizar al máximo el riesgo de contagio.
Cuando Lakua decretó el cierre de bares y restaurantes a comienzos de noviembre, puso en el punto de mira los encuentros sociales como la principal causa del aumento de los contagios en esta segunda ola. Y ahora insiste en la importancia de no relajar las medidas de seguridad. Esta es una responsabilidad de todos, tanto de hosteleros como de clientes.
Si este sábado tiene previsto tomarse un café o un vino en su bar de siempre, lo primero que tiene que tener en cuenta es la tasa de incidencia de su municipio, ya que la hostelería solo reabrirá en aquellas localidades en las que la tasa de incidencia sea inferior a 500 casos por 100.000 habitantes (es decir, todas aquellas que estén en zona roja no podrán abrir sus locales de hostelería). Además, se tratará de una reapertura parcial, entre las 06.00 y las 20.00 horas.
Las terrazas estarán a pleno rendimiento, sin embargo, en el interior, habrá un aforo del 50%. No se podrá consumir en la barra o de pie y habrá que llevar la mascarilla en todo momento, solo podrá retirarse en el momento de la ingesta de comida y bebida e, inmediatamente después, habrá que volver a ponérsela.
Además, solo se podrán juntar un máximo de seis personas, siempre, sentadas alrededor de una mesa o juntando dos en caso necesario.
Asimismo, se desaconseja el visionado colectivo de deportes televisados en el interior de los locales. Y aunque no está prohibido, es altamente recomendable no fumar en las terrazas.