El Consejo de Gobierno andaluz ha tomado conocimiento hoy de la actualización del estudio sobre recursos asistenciales elaborado por la Consejería de Salud y Familias ante un posible escenario de 3.000 pacientes ingresados por Covid-19 en Andalucía.

Así lo ha anunciado el consejero de la Presidencia, Administración Pública e Interior y portavoz del Gobierno andaluz, Elías Bendodo, en la rueda de prensa posterior a la reunión semanal del Consejo de Gobierno, en un día en el que la cifra de hospitalizados por Covid-19 en Andalucía se ha elevado a los 938 pacientes, 70 más en 24 horas, de los que 120 se encuentran en una Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), lo que supone cinco más que este lunes.

Bendodo ha indicado que la curva de ingresos hospitalarios por coronavirus en Andalucía "preocupa" a la Junta "porque empieza a producirse un ascenso más pronunciado que en días anteriores", especialmente en planta, y "algo menos" en UCI. Ha explicado además que el número de ingresos se está incrementando "muchísimo" en los últimos días en Sevilla.

El consejero portavoz ha recordado que ni en el "pico" de la pandemia Andalucía llegó a alcanzar los 3.000 ingresos, ya que el día en el que más hospitalizados contabilizó la comunidad fue el 30 de marzo con 2.708, pero ha defendido que la Junta debe "anticiparse" como, según ha incidido, ya hizo en la primera ola y que fue "clave" para que la pandemia "evolucionara mejor" en Andalucía que en otras comunidades, y por eso ha acordado activar dicho plan de contingencia.

En concreto, ha detallado que fue el Comité Director de Alertas, que se celebra todas las semanas, el que aprobó este pasado lunes este plan de contingencia que este martes ha elevado al Consejo de Gobierno el consejero de Salud y Familias, Jesús Aguirre.

Bendodo ha señalado que este plan supone que, "en base a un estudio de proyección de la Consejería de Salud, todas las provincias de Andalucía estarían preparadas a asumir la carga de ingresos hospitalarios de 3.000 hospitalizados sin necesidad de activar recursos asistenciales extraordinarios".

No obstante, el plan contempla la posibilidad de que, en algún momento, se detecte presión asistencial localizada, para lo que se utilizarían recursos privados o estructuras ya preparadas.

En líneas generales, este plan funcional contempla la adaptación de la gestión asistencial, para lo que se propone la definición de una reserva de camas de hospitalización, observación, unidades de recuperación postanestésica y UCI, con el fin de tener operativas la mayor cantidad de unidades disponibles, así como de respiradores.

También se prevé la adecuación progresiva de la actividad asistencial; la suspensión de todas las cirugías no oncológicas que necesiten UCI, reservando su disponibilidad para pacientes afectados por Covid-19; la disminución, aplazamiento o suspensión de la cirugía menor ambulatoria en función de la situación epidémica local, y el aplazamiento o suspensión de todas las consultas de revisión no oncológicas, así como de pruebas diagnósticas en pacientes no oncológicos.

Por su parte, se mantendrían todas las revisiones oncológicas, al igual que las consultas, pruebas diagnósticas y/o tratamientos de esta índole. De igual modo, se mantendrían las primeras visitas y pruebas de primer diagnóstico de patologías potencialmente graves y del seguimiento del embarazo, y se potenciarían las consultas en acto único.

Igualmente, se mantendrían totalmente operativas las consultas y cirugías de urgencias y partos y la actividad relacionada con trasplantes, transfusiones o cualquier seguimiento de patologías que requiera soporte especializado, según ha detallado el consejero portavoz.

Este plan también contempla el mantenimiento de la actividad total de los servicios de la Empresa Pública de Emergencias Sanitarias (EPES) y Salud Responde. La gestión de las ambulancias privadas quedará bajo la coordinación de EPES.

En el caso de la Atención Primaria, se mantendría la actividad, incluida la relacionada con el calendario vacunal, con preferencia a los servicios de urgencias, los equipos móviles y los avisos domiciliarios. En este ámbito se potenciará la teleconsulta y la telemedicina.

En el ámbito de la gerencia, se podrían incorporar al trabajo los liberados sindicales que así lo soliciten. Al igual que en la situación actual, se continuará con la restricción de visitas a un único familiar y se establecerán medidas de acompañamiento de los pacientes en situaciones de final de vida, así como partos, menores y discapacidad.

Por último, el plan contempla la posibilidad de retomar medidas tomadas para la evacuación de pacientes a otros hospitales privados o instalaciones habilitadas en los casos en los que la situación epidemiológica lo justifique. En este sentido, también se contempla el posible uso de instalaciones externas al hospital para atender a pacientes con sintomatología leve conforme se vayan dando de alta los hospitalizados.

Todas estas medidas asistenciales relacionadas serán de idéntica aplicación para la actividad sanitaria privada y estarán coordinadas por las delegaciones territoriales de Salud y Familias a través de las mesas de seguimiento provinciales.

Estas previsiones se han calculado atendiendo a la proyección epidemiológica en Andalucía, al igual que las tasas actuales de hospitalización y UCI en cada provincia, de forma que se estima que, en un escenario de 3.000 hospitalizaciones en la comunidad, la provincia de Almería concentraría el 8% de las hospitalizaciones totales, con un total de 241, de los que 36 pacientes estarían en UCI.

En Cádiz, con el 13,4% de las hospitalizaciones, se contempla un escenario de 404 ingresos, de los que 60 serían pacientes en UCI; en Córdoba, con el 10,8% de los ingresos, se prevén 326 hospitalizaciones --49 de pacientes en UCI--; en Granada, con el 11,4% de hospitalizaciones, se contempla un escenario de 344 ingresos --52 en UCI--, y en Huelva, con el 0,6% del total, se contempla un escenario de 20 ingresos con cuatro pacientes en UCI.

Llegado dicho escenario en la provincia onubense, la Junta entiende que no es necesaria la activación de planes de contingencia específicos, al igual que ocurriría en Jaén, que, según la previsión de la Junta, acumularía el 4,5% del total de hospitalizados, hasta 135, de los que 20 serían pacientes en UCI.

En Málaga, con el 28,9% del total de hospitalizaciones, se contempla un escenario de 868 hospitalizaciones, de los que 124 serían UCI, mientras que, por último, en Sevilla, con el 22,1% de los ingresos, se contempla un escenario de 664 hospitalizaciones, de lo que 100 serían pacientes en UCI, si bien en ese caso no sería necesaria la activación de los planes de contingencia específicos de los distintos centros asistenciales.

"NO HAY NI HA HABIDO TRANSMISIÓN COMUNITARIA"

Pese a la elaboración de este plan, Bendodo ha incidido en que la tasa de incidencia del coronavirus en Andalucía sigue siendo de las más bajas entre las comunidades autónomas atendiendo al número de casos confirmados por PCR por cada 100.000 habitantes en los últimos 14 días.

Según los datos del Ministerio de Sanidad difundidos este lunes, Andalucía alcanzaba en esa variable una tasa de 129,57 positivos por cada 100.000 habitantes, lejos del 247,66 nacional, siendo la cuarta comunidad autónoma con una tasa más reducida.

Además, a preguntas de los periodistas, Bendodo ha aseverado que en Andalucía "no hay ni ha habido transmisión comunitaria" de coronavirus en la comunidad autónoma en lo que va de pandemia, pese a que la semana pasada advirtiera de "contagio comunitario" en la provincia de Málaga.