- El director regional de la OMS para Europa, Hans Henri P. Kluge, avisó ayer de que Europa sigue estando en el “ojo de la tormenta” del covid-19, y pidió a los países que cuando inicien la desescalada de las restrictivas medidas implantadas para contener al virus se guíen por los principios de salud pública.
Y es que, tal y como explicó, los casos de personas contagiadas por el nuevo coronavirus continúan aumentando en Europa y, de hecho, en los últimos 10 días se ha duplicado el número de infectados, llegando casi al millón de personas. Unos datos que evidencian que el continente europeo cuenta con el 50% de la carga global del covid-19.
Además, Kluge lamentó la muerte de más de 84.000 personas en Europa como consecuencia del virus, si bien reconoció que algunos países ya están empezando a reducir el número de nuevos contagios como, por ejemplo, España, Italia, Alemania, Francia y Suiza, aunque en otros aún no hay una clara desescalada o existe un aumento de los contagios, como Reino Unido, Turquía, Ucrania, Rusia y Bielorrusia.
“No se equivoquen, a pesar de este clima primaveral, permanecemos en medio de una tormenta. Varios países aún no han sentido su pleno impacto, mientras que otros están experimentando una caída ya que la cantidad de nuevos casos de covid-19 está disminuyendo”, detalló.
Por este motivo, Kluge pidió “no bajar la guardia” y destacó la importancia de que los Gobiernos estudien bien las medidas que van a llevar a cabo para comenzar a levantar las restricciones. De hecho, informó de que hoy va a mantener una reunión con los ministros de salud de 53 países europeos para mostrarles los puntos claves de una estrategia que está elaborando la región europea de la OMS y que publicará la próxima semana.
Dicho esto, el experto advirtió de que “no hay victorias rápidas” y de que está entrando en un periodo en el que, posiblemente, se va a necesitar ajustar “rápidamente” las medidas, implantar o eliminar nuevas restricciones y monitorear constantemente la efectividad de estas acciones y la respuesta del público.
“Finalmente, el comportamiento de cada uno de nosotros determinará el comportamiento del virus. Esto requerirá perseverancia y paciencia, no hay una vía rápida a la normalidad. Permanecemos en el ojo de la tormenta. Podemos detener al virus cuando implementamos medidas comprobadas, garantizando que podamos identificar, aislar y probar todos los casos sospechosos, poner en cuarentena y controlar la salud de todos los contactos cercanos; brindar atención a quienes lo necesitan; y garantizar el distanciamiento físico si es necesario”, zanjó.