La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha sostenido que alrededor de 3.000 mayores han fallecido en las residencias de la autonomía desde que comenzó la crisis del coronavirus, aunque ha precisado que es "muy difícil" saber si estas muertes se deben directamente a la pandemia.
En una entrevista en la Cadena Ser, recogida por Europa Press, ha recordado que la autonomía cuenta con unas 500 residencias, con más de 50.000 personas en ellas, y ha incidido en que es "imposible llegar a todas partes" en esta situación. Pese a estas palabras, ha defendido que, con la últimas medidas y con ayuda, cada vez están más cerca "de tener controlada la situación".
Además, ha avanzado que, cuando pase el coronavirus, todo el material que se ha comprado y que después no hará falta en los hospitales se destinará a medicalizar las residencias. Según la presidenta, el material que ahora se utiliza para el covid-19 puede servirles en el futuro para "proporcionarles otro tipo de bienestar".