Bilbao - No es fácil mantener la calma en una situación de estas características. Vecinos del barrio de Ei-tzaga de Zaldibar, situado en el entorno del vertedero se reunieron ayer para intentar encontrar respuestas. Visiblemente enfadados, intentaron analizar la situación en la que se encuentran tras desprendimiento. “Estamos preocupados, ¿cómo no vamos a estarlo si lo tenemos todo cerca de casa? Lo que más nos duele es que no sabíamos nada de lo que había ahí”, indicó una vecina en declaraciones a ETB.

Además, muchos de los vecinos se quejaron del fuerte olor que se respira. “Huele raro, raro, muy raro”, indicó un vecino. Otra vecina, notablemente preocupada, aseguró que le gustaría saber “hasta qué punto” le puede afectar a su salud.

Además, los vecinos que se reunieron ayer denunciaron la falta de información por parte de las instituciones vascas. “Te pones nervioso porque no tienes información y escuchas cosas como que si hay lindane...”, indicó uno de los vecinos. Algún otro hizo mención al incendio que comenzó el pasado viernes. “Ahora sale humo de un sitio que nunca se ha quemado y dicen que no ha sido provocado. Están quemando algo que no quieren que se vea”, afirmó.

La sobrina de uno de los desaparecidos, Helene Alberdi, aseguró que su tío había manifestado en varias ocasiones su “preocupación” por la seguridad del vertedero de la empresa Verter Recycling en el que trabajaba, ya que “habían aparecido grietas” y por el tipo de residuos que allí se depositaban. Asimismo, en declaraciones a los medios, pidió que se sigan buscando a los desaparecidos hasta que se encuentren sus cuerpos y reprochó, también, “la falta de la información” que reciben por parte de las instituciones.

Ekologistak martxan Por su parte, Ekologistak Martxan alertó de la posibilidad de que entre los residuos industriales que se almacenaban en el vertedero de Zaldibar haya restos de lindano, material considerado altamente tóxico. Según avisó esta organización, “el olor a lindano es notable” en la zona por lo que tiene “fundadas sospechas de la existencia” de esa sustancia entre los depósitos de la escombrera que sufrió el corrimiento de tierras y, por tanto, alertó de “la imposibilidad de apagar el fuego que se ha originado” en la parte alta del vertedero. Este incendio sigue estando controlado tras 21 descargas de agua de un helicóptero. La viceconsejera de Medio Ambiente desmintió estos hechos. Los técnicos que analizan el aire del entorno indican que “los niveles de contaminación se mantienen en parámetros normales”. Además, la Agencia Vasca del Agua toma muestras diarias de las aguas superficiales que puedan ir a parar al río para controlar su estado.

“Hay mucha tierra que está contaminada y no sabemos con qué, pero no la podemos llevar a otro sitio porque donde la lleves vas a contaminar. Ya tenemos bastante contaminado Euskadi como para seguir trasladando mierda”, indicó un miembro de la plataforma. - DNA/ Efe