Iruñea - El Gobierno de Nafarroa, reunido ayer en sesión extraordinaria, acordó la declaración de zona catastrófica en trece municipios afectados el lunes por las lluvias torrenciales y la súbita crecida del río Cidacos, que causó daños cuantiosos en viviendas, comercios, campos de cultivo e infraestructuras. Además, la consejera de Presidencia, Función Pública e Interior del Gobierno de Navarra, María José Beaumont, informó de que acordaron solicitar a la Administración del Estado la declaración en esos municipios de zona afectada gravemente por una emergencia de protección civil. Se trata de los ayuntamientos de Barasoain, Beire, Ezprodi, Garinoain, Leoz, Lerga, Olite, Orisoain, Murillo el Cuende, Pitillas, Pueyo, San Martín de Unx y Tafalla, que sufrieron graves daños en las inundaciones del lunes.
Beaumont explicó que el Ejecutivo foral adoptó este acuerdo dada la situación de “máxima gravedad” que han vivido estos municipios, donde hubo cortes de suministro de electricidad, desperfectos en depuradoras de agua y daños en carreteras, algunos de los cuales aún no se han subsanado.
Mucho trabajo pendiente Aunque se han hecho grandes avances en las labores de limpieza y desescombro en estas localidades, aún queda mucho por hacer y, por ello, el Gobierno Barkos acordó crear una oficina de voluntariado para coordinar, con las entidades locales, el trabajo de las personas que quieran prestar su ayudar. Entre las infraestructuras básicas de estos municipios, ya están operativas todas las depuradoras de agua, incluida la de Pueyo, que fue la más afectada por la crecida del río.
La declaración como zona de emergencia por el Gobierno de Pedro Sánchez depende del Consejo de Ministros y después, de los ministerios competentes, por lo que no pudo dar un plazo al respecto, aunque dijo que el Ejecutivo navarro “pondrá todos los medios” para agilizar los trámites.
En la sesión urgente se decidió asimismo comunicar a la empresa concesionaria de la autopista AP-15 la liberalización del peaje del área de Imarcoain hasta que concluyan las obras en la N-121, que permanece cortada a causa de un gran socavón. - Efe