2 I. Alonso

vitoria ? El Gobierno de España modificará en septiembre la Ley de Ordenación de Transportes Terrestres (LOTT) para que las comunidades autónomas puedan “imponer” a empresas como Uber o Cabify las condiciones que consideren adecuadas en el marco de su política de movilidad. De este modo, el Ejecutivo de Pedro Sánchez dará el paso necesario para implementar la anunciada habilitación a las comunidades que lo deseen para que puedan gestionar el sector de VTC en sus respectivos territorios. Septiembre, por tanto, se presenta como un mes clave para dar carpetazo al conflicto generado en el sector del taxi, que está en pie de guerra contra los coches de alquiler con conductor.

Pese a que en Euskadi no existe una problemática tan grave como en las grandes capitales del Estado, el Gobierno Vasco lleva más de un año trabajando en la realidad de este sector con la elaboración de un Decreto que regule la actividad de vehículos con conductor (VTC) para favorecer las tareas de inspección y control. Según los cálculos que maneja la consejera de Desarrollo Económico e Infraestructuras, Arantxa Tapia, el Ejecutivo de Gasteiz prevé aprobar este decreto en otoño. El sector vasco del taxi ya ha dicho que mirará con lupa la normativa autonómica para velar que el texto recoja sus intereses ante la “competencia desleal” de Uber o Cabify. De lo contrario, los taxistas ya han anunciado que están dispuestos a organizar huelgas, como las de esta semana.

Además, antes de diciembre comenzará a operar el Registro de Comunicaciones de los Servicios de Arrendamiento de Vehículos con Conductor, cuyo desarrollo tecnológico está implementando el Ministerio de Fomento. Este registro para garantizar el cumplimiento de la normativa por parte de los vehículos con licencia de alquiler con conductor, es una de las propuestas incluidas por el ministro de Fomento, José Luis Ábalos, en el informe que presentó ayer ante el Consejo de Ministros. En el documento se aborda el marco jurídico actual y se realizan “propuestas de mejora para la convivencia”, unas mejoras de las que no han trascendido los detalles.

También se propone crear un Grupo de Trabajo de Propuestas y Buenas Prácticas Relativas a los Sectores del Taxi y las VTC, en aras de “mejorar la competitividad, la competencia y la prestación del servicio de ambos, así como compartir buenas prácticas y experiencias exitosas en la búsqueda de soluciones que corrijan el desequilibrio actual”. Y es que, mientras la actividad del taxi está sujeta tarifas obligatorias en todo caso, horarios y calendarios determinados o estacionamientos en zonas reservadas las VTC ha venido gozando desde el principio de un régimen mucho más flexible, sin perjuicio de la obligatoriedad de la precontratación de servicios.

En el informe se reconoce que el papel de los VTC ha cambiado sustancialmente en los últimos años y, “hoy en día, se han convertido mayoritariamente en una forma de movilidad urbana o periurbana que prestan servicio, en muchos casos, en competencia con el taxi”. Además se expone que “las recomendaciones de la Unión Europea van en la línea de promover políticas de movilidad integradas” y que las comunidades “ya son competentes” en el transporte por carretera que discurra íntegramente en su territorio. l