LEKEITIO - Un preciado tesoro del que sentirse orgulloso. Una riqueza social de valor incalculable. Un sistema plural y de calidad con el que sentirse identificado e implicado. La Escuela Pública Vasca destaca por sus valores: euskaldun, participativa, innovadora, de todos y para todos. Unas señas de identidad reconocidas y reconocibles, tal y como quedó ayer patente en Lekeitio, donde más de 35.000 personas personas, según apuntaron los organizadores, acudieron a la celebración de la 27º edición de la fiesta de la escuela pública vasca impulsada por la agrupación de asociaciones de padres y madres, Ehige, con el objetivo de reivindicar que la escuela pública sea el “eje” del sistema educativo.

La jornada, soleada y con temperaturas veraniegas por la mañana, arrancó con mucho ritmo cuando a la diez y media de la mañana se dio el pistoletazo de salida con la inauguración oficial, celebrada en el instituto de Educación Secundaria Iturriotz. Al acto asistieron representantes del Departamento de Educación del Gobierno Vasco, con la consejera Cristina Uriarte a la cabeza, la viceconsejera de Política Lingüística Miren Dobaran, representantes de la Diputación Foral de Bizkaia como la diputada de Cultura y Euskara, Lorea Bilbao, la presidenta del Consejo Escolar de Euskadi, Neli Zaitegi, representantes de partidos políticos, de los sindicatos, Ikastolen Elkartea, ILP Eskola Inklusiboa, Kontseilua, AEK y Ongi Etorri Errefuxiatuak, entre otros.

Durante su discurso inicial, los organizadores pusieron en valor la importancia de la escuela pública como elemento de cohesión social. Así, ante las autoridades presentes, la presidenta de Ehige, Ana Puente, solicitó al Gobierno Vasco una apuesta inequívoca por el sistema público porque en Euskadi la enseñanza pública representa “el 50% de los centros”, frente a lo que ocurre en otros países de Europa, “donde la escuela pública alcanza el 80% de todo el sistema”, apuntó.

Por ello, reclamó “el apoyo de las autoridades públicas” ya que la escuela pública vasca “es la única que ofrece a todos una enseñanza de calidad”, esgrimió. Al mismo tiempo, defendió superar el actual sistema de modelos lingüísticos y promover el uso del euskera. De cara a la elaboración de la ley de educación, solicitó “hacer un diagnóstico exhaustivo” del sistema educativo vasco y cambiar el modelo de financiación entre los colegios públicos y concertados.

“Para elaborar una nueva ley de educación, hay que poner encima de la mesa temas importantes a debatir entre todos. Hay que modificar el modelo de financiación revisando las políticas educativas de los últimos años y priorizar los objetivos de mejora social por encima de intereses corporativos, ideológicos, religiosos o de segregación”, indicó. Para ello, pidió “abrir un debate amplio teniendo en cuenta las solicitudes de los agentes educativos para lograr un sistema educativo digno y acordado”.

MODELO VASCO Por su parte, la consejera de Educación, Cristina Uriarte, destacó que en Euskadi la educación ha estado siempre “fuera del enfrentamiento político”, lo que ha ofrecido estabilidad al modelo vasco, frente a lo ocurrido en el Estado, donde “han hecho siete reformas del modelo en las últimas cuatro décadas”. Además, destacó que el modelo propio vasco “no ha cedido” ante las “imposiciones” del Gobierno central. “Hemos encontrado nuestro camino. Para ello, la herramienta ha sido la palabra y entender el punto de vista de los otros. Nunca ha habido tanto acuerdo como ahora”, manifestó. No obstante, subrayó que hay que seguir “trabajando y mejorando”. “No nos podemos quedar ahí. Hay que definir la educación del futuro e impulsarla dejando de lado las diferencias. Construirla entre todos y mirar al futuro. Es un tesoro que hay que cuidar. Tenemos un desafío como pueblo”, agregó. Además, el anfitrión de la jornada, el alcalde de Lekeitio, Koldo Goitia, destacó que “la escuela pública es plural y está compuesta por gente que piensa diferente, y así tiene que seguir”. “Todos somos la escuela pública”, agregó.

Durante toda la jornada el tiempo acompañó hasta que a las cinco de la tarde la lluvia hizo su aparición. Pese a ello, todas las actividades se desarrollaron “como estaba previsto”, explicaron los organizadores. Y es que gracias a los espacios cubiertos se pudieron mantener todas las actividades. Un día redondo gracias a la “implicación de todo el pueblo de Lekeitio”. Errenteria, el 2 de junio de 2019, será la siguiente parada de la fiesta bajo el lema “Makina bat taupada”.