Bilbao - ¿Cúal es la evolución de las interrupciones voluntarias del embarazo en la CAV?
-Los datos de 2016 no se han publicado pero en Euskadi todavía se realizan unos 4.000 abortos o interrupciones voluntarias del embarazo al año, con una tendencia levemente a la baja.
En algunos países europeos no sirve el argumento de la objeción de conciencia para no practicar un aborto.
-Hemos hecho la foto de la Unión Europea, y 22 países regulan la objeción de conciencia y otros seis no. En estos últimos, sobre todo países escandinavos y Chequia, prohiben regularla porque dicen que siempre que se reglamenta se hace contra el interés de las mujeres. Sin embargo en otros, con una presencia católica fuerte como Irlanda, Italia, Chipre, o Malta, prima la objeción.
¿Cuál es la situación en el Estado español?
-Aquí tenemos una ley bastante abierta y progresista, la del 2010. Exige que la objeción de conciencia, que se reconoce a todos los profesionales directamente implicados, debe ser por escrito y anticipadamente. Sin embargo, no se cumple. ¿Por qué? Porque en España el aborto, aunque es una prestación sanitaria, no se practica en la red pública, sino en la privada, en centros concertados.
Por eso Osakidetza realiza un número ínfimo de abortos.
-Es que la pública ignora el derecho a la objeción porque se ejerce pero sin declararlo. Pero como no hay denuncias ni quejas, y el tema funciona con profesionalidad y sin mayores escándalos, sin morbilidad, y con 0 mortalidad, no hay conflicto.
Así parece que todo funciona con normalidad.
-Realmente es una anormalidad anómala. Pero hay dos casos curiosos. Por ejemplo, en Nafarroa se abrió un registro de objetores y solo se apuntó uno, porque nadie quiere figurar como objetor para que no haya represalias en el servicio. Y el Servicio Gallego de Salud, Sergas, fue condenado por arriesgar la vida de una paciente a la que derivó a abortar a Madrid tras ser rechazada en un hospital de Lugo. La paciente perdió al final el útero. Lo que no puede ser es que se tenga derecho a una prestación y se sea rechazado. El informe del Ministerio de Sanidad de 2015 dice que hay 17 provincias donde no se hacen abortos, o sea que todos los médicos son objetores en la práctica.
¿Hay que alegar algún motivo para una interrupción voluntaria del embarazo?
-En España el acceso al aborto es a libre petición de la mujer sin tener que justificar nada hasta la semana 14 de embarazo.