DONOSTIA. Estos son algunos de los datos incluidos en la memoria del Plan del Sida e Infecciones de Transmisión Sexual presentado por el consejero de Sanidad, Jon Darpón, el coordinador de esta iniciativa, Antonio Arraiz, y la presidenta de Euskalsida, la federación de asociaciones que trabajan en el ámbito de esta enfermedad, Marta Pastor, y Joseba Rekalde, de la asociación Harribeltza.
Darpón ha remarcado que Euskadi es una de las pocas comunidades autónomas que mantiene activo un plan contra el Sida al tiempo que ha señalado que "no puede bajarse la guardia mientras existan nuevos contagios".
En el País Vasco el año pasado se notificaron 158 nuevos diagnósticos de VIH, lo que supone un caso cada dos días del año y una proporción de 7,3 por cada 100.000 habitantes, unas cifras similares a las de años anteriores, de los cuales el 80 % son hombres.
Aunque la media de edad se sitúa en torno a los 39 años, el 64 % de los nuevos contagiados supera los 40 y el 12 % tiene más de 49, lo que evidencia a juicio de Darpón que existen "más variables que la falta de información" a la hora de explicar un nuevo caso.
Mientras la vía parenteral a través de inyección de drogas continúa el descenso iniciado en los años noventa y representa solo el 6,3 %, la transmisión en hombres que tienen sexo con hombres mantiene la tendencia ascendente que se espera "siga creciendo", ha señalado Darpón.
Dirigido a este colectivo el Servicio Vasco de Salud puso en marcha hace cinco años la consulta on line que permite plantear de forma anónima prácticas de riesgo o síntomas y recibir consejos o derivación a centros asistenciales para ser tratados con retrovirales. Este servicio ha sido utilizado por 526 hombres desde 2013.
Entre las estrategias destinadas a evitar los diagnósticos tardíos Darpón ha recordado que en el País Vasco son ya 50 las farmacias repartidas por los tres territorios para llevar a cabo test rápidos de VIH de forma "anónima y confidencial".
En 2016 se llevaron a cabo 2.775 pruebas de este tipo, una cifra similar a la de años anteriores, de los cuales 27 fueron positivos.
Respecto al gasto en retrovirales, el año pasado fueron atendidos 5.661 pacientes lo que supuso un gasto paraOsakidetza de 36,1 millones de euros, (6.384 euros por paciente), un 3 % más que en 2015.
En cuanto a las personas que desarrollan la enfermedad, desde 1984 se han diagnosticado 5.930 casos, el 51 % en Bizkaia, el 38 % en Gipuzkoa y el 10 % en Araba.
El número de enfermos ha pasado de los alrededor de 900 casos que se detectaban en los años 90 a los 39 de 2016.
Entre las iniciativas puestas en marcha para las personas con VIH Osakidetza puso en marcha el pasado año el programa Paciente Activo de la Escuela de Salud por el que se forma a colaboradores de las ongs que trabajan en este ámbito con el objeto de que ellos eduquen a los afectados para que consigan una mejor gestión de la enfermedad.
La presidenta de Euskalsida ha situado la lucha contra el estigma de la enfermedad como otro de los retos pendientes.
En este sentido ha señalado que trasladará al Parlamento vasco la la necesidad de que la legislación nacional cambie la calificación del sida como enfermedad "infecto contagiosa" por "infecto transmisible" para que de esta manera las personas con VIH puedan optar a oposiciones como bomberos o policía.