MADRID. Según los datos facilitados por el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE), esta cifra de acuerdos laborales sellados hasta junio supone la mayor para la primera mitad de un año desde el inicio de la serie histórica, que se remonta a 1995.
El año pasado, que terminó con el récord de 19,9 millones de contratos, el primer semestre cerró con 9,4 millones.
Para encontrar cifras similares, aunque por debajo de estos registros, hay que remontarse hasta 2007 cuando se firmaron 9,2 millones de contratos en España hasta junio, en tanto que el año cerró con 18,6 millones.
Mirando una década más atrás, esos 10,5 millones de contratos hasta junio superan, por ejemplo, a todos los que se sellaron en 1997 (10 millones).
La cifra de este año, señal del dinamismo de un mercado laboral que recupera empleo tras los duros años de crisis, es también reflejo del peso de la temporalidad en el mercado.
Así, de los 10,5 millones de contratos hasta junio, un 11,5 % más que en el mismo periodo de 2016, más de 9,5 millones, el 90,8 % fueron temporales.
Y entre los temporales, el 28,8 %, 2,7 millones, duró menos de siete días. Si se mira hasta un periodo de tres meses, suponen el 50 % del total de los temporales, es decir, que la mitad no llegó al trimestre de duración.
Frente a esto, se firmaron hasta junio 964.839 contratos indefinidos.
Por sectores, y siempre con los datos acumulados hasta junio, el 68,7 % de los acuerdos laborales, 7,2 millones, fueron en el sector servicios. Y de ellos, 2,1 millones en la hostelería.
Por detrás, la agricultura copó el 14,8 % de los contratos y la construcción, el 10,5 %, con 659.510 contratos.
En la industria se suscribieron 1 millón de contratos, el 10 % del total.
Por sexos, de todos los contratos firmados hasta junio, el 56,6 % fueron para hombres y el 43,4 % por mujeres.
Mirando solo a los datos de junio, el número de contratos alcanzó los 2 millones, el mayor de toda la serie histórica en cualquier mes con una subida del 8,8 % interanual (169.180 contratos más que en junio de 2016).
Del total de contratos, 166.462 fueron indefinidos, lo que implica un aumento del 12,2 % sobre igual mes del ejercicio anterior, y el resto (1,9 millones) temporales.
Con estas cifras de contratación, animada por la temporada turística y las rebajas de verano, junio cerró con 87.692 nuevos afiliados a la Seguridad Social y el paro cayó en 98.317 personas.
Así, el total de desempleados inscritos en los servicios públicos de empleo se sitúo en 3.362.811 personas, el nivel más bajo de los últimos ocho años, mientras que la Seguridad Social alcanzó los 18.433.107 de inscritos.
Desde junio de 2016 la afiliación ha crecido en 672.835 personas, el mejor registro en once años, lo que ha ayudado a que se hayan recuperado ya 2,28 millones de puestos de trabajo destruidos durante la crisis, que equivalen al 68,2 % de todo el empleo perdido.