madrid - El plan de urgencia impulsado por el Gobierno para agilizar las devoluciones por cláusulas suelo a través de la vía judicial encara su primera semana inmerso en las críticas de funcionarios, letrados y consumidores, que reprochan el exceso de “improvisación” en la puesta en marcha de estos juzgados. El jueves 1 de junio entraban en funcionamiento las 54 sedes repartidas por toda la geografía y especializadas para tramitar las demandas por estas cláusulas abusivas.

Sindicatos de funcionarios cargan contra la rápida activación de estos juzgados, designados por el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) el pasado 25 de mayo, lo que a su juicio ha generado una situación de “improvisación y la más absoluta ausencia de planificación”.

Así al menos lo denuncia el Sindicato de Letrados de la Administración de Justicia (Sisej), que estima que esta medida “extraordinaria” supone la “ruptura del fuero ordinario”, por el que los asuntos se repartían en función del domicilio de los perjudicados, “con la incomodidad y el aumento de gastos que conlleva”.

Además, el Sisej advierte de que el establecimiento de estos juzgados se ha producido “sin un previo estudio de campo” con el que poder calcular la cantidad de recursos, tanto humanos como materiales, necesarios para su buena marcha, circunstancia que ha llevado a adoptar, en el plazo “escaso” de una semana, medidas urgentes. - Efe