Iruñea - La fuga de alumnos navarros a Euskadi tiene que ver más con la escasa oferta general de la Universidad Pública de Navarra (UPNA) que con la falta de titulaciones que se impartan íntegramente en euskera, aunque esto influye, según ha sostenido el rector Alfonso Carlosena en el Parlamento quien, no obstante, subraya el compromiso del centro con el refuerzo de las materias en euskera (se han duplicado entre 2010 y 2015 y subirán un 16,5% para 2019) rentabilizando el profesorado bilingüe (15%) para intentar atender una demanda creciente de alumnos que proceden del modelo D (casi uno de cada tres). Y todo ello en unos “parámetros de calidad” y de planificación estratégica aplicables a “toda la oferta académica” y en un contexto de apuesta por una universidad plurilingüe que combine “el euskera, el inglés, el castellano e incluso el francés” señaló. El rector sustenta este diagnóstico en que hay 1.503 navarros matriculados en la Universidad del País Vasco (UPV/EHU), aunque sólo 270 (uno de cada seis) se van para estudiar carreras que también se ofertan en la UPNA aunque es cierto que de ellos, 198 (un 73%) buscaban esa misma formación pero en euskera, algo que el centro navarro solo da íntegramente en Magisterio.
La reciente doble comparecencia del consejero José Luis Mendoza y del rector Alfonso Carlosena en el Parlamento para hablar del euskera y la Universidad (solicitada por EH Bildu) tenía dos preguntas subyacentes. La primera tiene que ver con si la UPNA atiende suficientemente la creciente llegada a su campus de alumnado que ha cursado los niveles inferiores en el modelo D. La segunda, otro clásico, era ver si las limitaciones de la oferta en y con euskera de la UPNA provocaba un éxodo de alumnado a la UPV/EHU. Y ambas cuestiones se planteaban desde dos ópticas previas opuestas: partidos y sensibilidades que ven insuficiente esta oferta y causa de pérdida de alumnado y quienes, como en otros debates, echan mano de argumentos conocidos (la UPNA no puede ser bilingüe “porque la sociedad navarra no lo es” y hay que primar la “calidad formativa” frente al idioma), como si lo uno y lo otro estuviera reñido, les respondieron. Al final los datos ni quitaron ni dieron razones, cada partido se quedó con su tesis.
Los alumnos del modelo D pasan del 20% al 30% en 15 años. Hoy en día cerca del 30% de los alumnos que aprueban la selectividad saben euskera. De ellos, el 82% dice que se matricularía en asignaturas en euskera, aunque luego realmente lo hace un 70%. Esto supone que en torno al 12-13% de los alumnos se han matriculado en euskera. En los primeros cursos hay una oferta mayor y en los cursos superiores las posibilidades disminuyen. Según el rector de la UPNA, “si nos centramos en los alumnos de primer curso, donde la asignaturas en euskera es mayor, las cifras varían y ese 13% se convierte en el 25% de media” y “varía según los centros, en Humanas y Sociales es del 41%y en Ciencias Jurídicas, del 14,4%”.
Las materias en euskera se han duplicado (de 112 a 246, un 20% del total) y subirán un 16%.
Sobre el profesorado que conoce euskera, el 75% no tiene ningún conocimiento y el 15% dice que tiene un conocimiento del euskera bueno o muy bueno y podría impartir en euskera, aunque es un 10% los que verdad imparten docencia en euskera. Gracias a ellos se ha pasado de 122 asignaturas que se impartían en euskera en el curso 2010-11 a 246 en el 2014-15. En relación con el conjunto de las asignaturas las impartidas en euskera suponen un 20%. En cuanto al número de créditos en euskera que se contemplan en cada grado para el curso 2019 en el Plan Estratégico de la institución recoge un incremento del 16,5% y se pasaría de 1.278 a 1.488 créditos.
Cada año se van a la UPV/EHU alrededor de 270 alumnos navarros.
El traslado de expedientes hacia la UPVEHU es de 1.033 de 2013 a 2017, una media al año de 258. En este curso, 279 que han hecho la selectividad en Nafarroa han ido a la UPV. Centrándose en titulaciones compartidas entre la UPNA y la UPV/EHU, la cifra de 1.503 baja a 270 (uno de cada seis) y de estos 198 en euskera (73%). En este caso, el traslado de expedientes sería de 184 en los cuatro años, 46 de media al año y el último año, 52.
La conclusión del rector: “La oferta cubre razonablemente bien la demanda pero de forma desigual y la reforzaremos”.
El rector de la UPNA reconoce que “la oferta cubre razonablemente bien la demanda y las expectativas de los alumnos si bien hay desequilibrios entre centros y titulaciones. Los traslados de navarros a la CAV para estudiar grados ofertados en la UPNA son poco significativos”. No obstante, la mayoría de los estudiantes se marchan a estudiar grados no ofertados en la UPNA.