ginebra - El Fondo de la ONU para la Infancia (UNICEF) pidió ayer a la comunidad de donantes 3.059 millones de euros para financiar sus acciones humanitarias en el mundo en 2017, de las que se beneficiarán 81 millones de personas, incluidos 48 millones de menores.
No obstante, los niños que aprovecharán la ayuda de Unicef representan sólo una fracción de los 535 millones de menores de edad que viven en países afectados por situaciones de emergencia, uno de cada cuatro niños hoy en día en el mundo.
“Los desafíos tienden a incrementarse, por eso lo que solicitamos también crece, aunque solo atendemos a una minoría de los que realmente necesitan ayuda”, aseveró en rueda de prensa Manuel Fontaine, director del programa de Emergencias de Unicef.
El dinero recaudado se usará para ofrecer acceso a la educación (27%), el agua potable y el saneamiento (21%), la nutrición (16%), la salud (11%) y la protección (11%), entre otras áreas, para menores de edad en 48 países del mundo.
Este llamamiento se centra especialmente en luchar contra la malnutrición infantil, “la amenaza silenciosa” que estima que en 2017 habrá 7,5 millones de niños malnutridos.
Asimismo, la mayor petición para un país es para costear las consecuencias del conflicto en Siria, a punto de entrar en su sexto año de guerra: 1.296 millones de euros.
De estos, 965 millones se destinarán a los planes de asistencia a los refugiados sirios en los países vecinos, mientras que los restantes millones se emplearán para los sirios que han permanecido en su país. Actualmente, más de 2,2 millones de niños refugiados sirios -de un total de 4,8 millones- viven en los países vecinos, especificó el responsable. - Efe