CÁDIZ. La Guardia Civil se ha incautado de 600 kilos de hachís en un vehículo que fue abandonado por su conductor tras una persecución por agentes del instituto armado entre San Roque (Cádiz) y Manilva (Málaga).
El instituto armado ha explicado en un comunicado que los hechos tuvieron lugar en un control establecido en la autovía A-7, sentido Málaga, dentro del término municipal de San Roque.
Uno de los agentes dio el alto a un vehículo que se aproximaba al punto de control y el conductor desobedeció las órdenes del Guardia Civil, aumentó la velocidad y se dio a la fuga.
El conductor huyó conduciendo de una forma temeraria y poniendo en grave riesgo la vida de los demás usuarios de la carretera y los agentes que estaban en el escalón de reacción salieron en persecución del vehículo.
Durante la persecución, el vehículo huido se adentró en la localidad de Manilva y circuló en dirección contraria hasta que colisionó con un turismo ocupado por dos personas.
Tras el impacto, el conductor abandonó el vehículo y huyó a pie por la localidad y los agentes prestaron una primera atención a los ocupantes del turismo, que fueron trasladados a un centro hospitalario en ambulancia.
En el vehículo abandonado, que había sido robado en Suiza, se incautaron de 20 fardos de hachís, con un peso de 600 kilos.
La Guardia Civil mantiene abierta una investigación para la detención del conductor huido por los delitos contra la salud pública, contra la seguridad y desobediencia a agentes de la autoridad.
De los hechos se han instruido las correspondientes diligencias, que junto al vehículo y la droga intervenidos han sido puestas a disposición de la Autoridad Judicial.