el año 2015 superó a 2014 como el más caluroso de la historia desde que existen registros y batió récords en la emisión de gases de efecto invernadero, según el informe anual de la Agencia Nacional de Océanos y Atmósfera de Estados Unidos (NOAA, en inglés). De acuerdo con este estudio, el clima en 2015 estuvo muy influenciado por el fenómeno de El Niño, que impactó al planeta de una forma sin precedentes. La temperatura de la superficie global de la tierra se situó entre los 0,42 y 0,46 grados centígrados, una décima más que en el año anterior, mientras que la temperatura de la superficie del mar registró entre 0,33 y 0,39 grados, también rompiendo la marca de 2014. Ambas fueron las temperaturas más altas desde la segunda mitad del siglo XIX, época en la que aparecen los primeros registros.
Estados Unidos, Europa y el continente africano registraron el segundo año más caliente de su historia, mientras que algunos países como España, Suiza, Rusia, Bielorrusia, Lituania o Finlandia rompieron el récord. También China vivió el año más caliente de su historia, al menos desde que existen datos. Además de récords de temperaturas, se alcanzaron registros históricos en sequías y precipitaciones a lo largo y ancho del planeta. El informe, llamado “Estado del clima”, también reveló un récord en emisiones de gases de efecto invernadero como el dióxido de carbono, el óxido de nitrógeno o el metano, que alcanzaron las 399,4 partes por millón (ppm), 2,2 más que el año anterior. El nivel de los mares también fue el más alto desde que se empezó a observar en 1993, con un aumento de 70 milímetros, mientras que la temperatura del Ártico fue 1,2 grados centígrados superior a la media de entre 1981 y 2010. Unos récords, los de 2015, que pueden quedar obsoletos muy pronto ya que el primer semestre de 2016 ya fue el más caluroso de la historia, todavía impactado por El Niño.
el niño En el informe anual climático de NOAA, elaborado por más de 450 científicos, se explica que el calor récord registrado el año pasado se produjo por una combinación de calentamiento global a largo plazo y uno de los fenómenos El Niño más fuertes que se conocen desde 1950. La temperatura de la Tierra es ya un grado mayor que a mediados del siglo XIX. Entre los puntos destacados de esta trabajo, NOAA destaca que los gases de invernadero fueron los más altos de la historia. Así, las principales concentraciones de gases de efecto invernadero, como el dióxido de carbono (CO2), el metano y el óxido nitroso, se elevó a nuevos valores altos récord durante el año 2015.
En cuanto a la temperatura de la superficie del mar fue la más alta de la historia. La temperatura media mundial de la superficie del mar registrada varió entre los 0,33C y los 0,39C por encima de la media, rompiendo la marca anterior establecida, también, en el año 2014. El Ártico continúa en fase de calentamiento y su extensión de hielo marino se mantuvo baja. La temperatura de la superficie terrestre del Ártico en 2015 fue de 1,2C por encima de la media 1981-2010. Así, supera a 2007 y 2011 como el mayor aumento de la historia. Además, la máxima extensión del hielo marino del Ártico -que alcanza en febrero- ha sido la más pequeña en 37 años, mientras que el mínimo extensión -en el mes de septiembre- fue la cuarta más baja de la historia.
NOAA también destaca la subida del nivel del mar a un nuevo máximo histórico en 2015. Éste se mide en unos 70 milímetros más que la subida observada en 1993, cuando se inició el mantenimiento de registros por satélite para el aumento del nivel global del mar.
glaciares y tormentas Por último, 2015 fue el 36º año consecutivo de retroceso glaciar en todo el mundo. En el hemisferio norte, la capa de nieve a finales de la primavera continuó con su tendencia descendente y junio registró la segunda más baja de 49 años de datos recogidos por satélite.
Por otra parte, el documento explica que los ciclones tropicales estuvieron el año pasado muy por encima de la media. Se registraron 101 en todas las cuencas oceánicas en 2015, muy por encima del promedio 1981-2010, que era de 82 tormentas. Respecto a las precipitaciones, hubo una mayor variabilidad en todo el mundo, con lluvias superiores a lo normal que dieron lugar a grandes inundaciones y un incremento de las zonas de sequía severa del 8% de 2014 al 14%. Greenpeace ha recordado que la superficie de la tierra congelada representa en torno al 25% del área de la Tierra que conserva, además de agua, “grandes cantidades de gases de efecto invernadero” que, en caso de derretirse, contribuirían a agravar el incremento de las temperaturas.