GAsteiz - ¿Es necesario que los más pequeños tengan un smartphone?

-Realmente no hasta llegar al menos a la adolescencia, donde sí se convierte en un elemento fundamental de su socialización y crecimiento como persona. Estamos dejando que la industria y las modas generen esta sensación de que es un dispositivo necesario, y una vez que caemos en la trampa, tampoco somos capaces de aprovechar las capacidades saludables que un teléfono móvil inteligente puede proporcionar. La realidad es que cada vez se les facilita antes un móvil inteligente, y no suelen estar preparados para manejar un dispositivo que les da acceso a todo tipo de contenidos y servicios en un contexto digital.

El control parental es una opción, pero este comportamiento limita la autonomía del menor ¿El límite?

-Los menores de edad tienen derecho a la intimidad, que tendrá que ser respetada sin dejar de lado la obligación de proteger, cuidar y enseñar que tienen padres y madres; de capacitar a hijos e hijas para que vayan adquiriendo esa autonomía necesaria en la vida, a ambos lados de la pantalla. Una vez llegada la adolescencia, la mayoría de los sistemas de control dejan de tener sentido ya que basta una búsqueda en YouTube para descubrir cómo saltarse las restricciones, por lo que para entonces es importante que se haya llegado a generar una buena relación de confianza para que los más pequeños cuenten con nuestro apoyo cuando lo necesiten.

Disponer de un smartphone también supone que puedan conectarse a Internet en cualquier lugar. Libertad, claro; pero los contenidos no apropiados están por doquier?

-Garantizar que tengan la madurez y el criterio adecuado es la mejor herramienta con la que podríamos dotar a menores para que accedan a contenidos apropiados a su edad. Para que hagan un uso más saludable de Internet tendremos que educarles y guiarles, estando ahí para cuando vean o lean algo que les inquiete o impacte, porque desafortunadamente los contenidos crueles, negativos y soeces abundan y triunfan en la Red y darán pie a más de una conversación necesaria.

¿Qué tipo de consejos deben transmitir los padres a los menores cuando se conecten a Internet?

-Tienen que entender que aunque aparentemente crean que sepan mucho de tecnología, lo que ocurre en Internet tiene un poco que ver con la tecnología y mucho que ver con las personas, y de eso saben mucho más los padres y las madres ya que tienen más experiencia en la vida.

¿Hay alguna edad recomendada para que los más pequeños se inicien en Internet?

-Si les configuramos la tele para que vean contenidos educativos o dibujos animados apropiados a su edad, o les mostramos una videoconferencia para saludar a la abuela que está en el pueblo, ya les estamos iniciando en Internet. Hay muchos usos beneficiosos que les podemos enseñar, y será siempre mejor que aprendan y utilicen esos servicios y herramientas de Internet, ya que si les dejamos solos y se dejan influir por las modas, solo usarán el smartphone para enviar fotos y darle al botón de “Me gusta”.

Ocio y aprendizaje ¿pueden y deben ir de la mano en Internet?

-Es una estrategia cada vez más habitual el combinar ocio y aprendizaje, y son muchos los recursos y programas educativos que utilizan metodologías y dinámicas entretenidas, mejorando la motivación y facilitando el aprendizaje.