Donostia - Tras una noche entera de trabajo por parte de dotaciones de bomberos de Donostia y de cinco parques de Gipuzkoa -los de Zarautz, Eibar Tolosa, Legazpi e Irun-, el fuego declarado ayer en la zona de Igeldo (las llamas se extendieron por la ladera de Donostia y de Orio y llegaron a acercarse a algunas viviendas, motivo por el que anoche fueron desalojados dos agroturismos y cinco caseríos) fue extinguido ayer a la mañana.
La última zona en la que se ha reavivado el fuego fue el camino de Bustintxuri, en Donostia, en las inmediaciones del restaurante Nicolás, donde ardió una chabola. A la zona de Igeldo se desplazó ayer el alcalde de Donostia, Eneko Goia; y el diputado foral de Gobernanza, Imanol Lasa, quienes confirmaron que el incendio fue “bastante intenso” pero “no ha habido que lamentar daños personales ni materiales”.
También acudió la directora de Montes y Medio Natural, Arantxa Ariztimuño, y el director de Agricultura y Desarrollo Rural, Xabier Arruti, quienes, junto con Goia y Lasa, conocieron in situ las afecciones generadas por el incendio y escucharon a los vecinos. En los dos establecimientos de turismo rural se encontraban alojadas una veintena de personas, a las que el Ayuntamiento de donostiarra ha facilitado alojamiento en un hotel y un albergue de la capital guipuzcoana. Los vecinos de los caseríos afectados se alojaron en las casas de amigos y familiares.
El alcalde recordó que los bomberos ya habían advertido a las autoridades municipales y forales de que “la situación era peligrosa” debido a la meteorología sin lluvias que se arrastra durante todo el mes de diciembre, “que ha dejado el terreno y la vegetación seca” y que, de hecho, “ha dado lugar a la actual situación de alerta”.
Caída de un árbol Por otro lado, el incendio declarado el sábado a las 15.30 en Igantzi, que estaba controlado desde ayer por la mañana, después de alcanzar el término de Lesaka, ha afectado con diferente incidencia a una superficie de unas 250 hectáreas de matorral, masas mixtas atlánticas, repoblaciones de coníferas y roble americano, según informó el Gobierno de Nafarroa. La presidenta del Ejecutivo, Uxue Barkos, visitó el puesto de mando avanzado, instalado en el parque de los bomberos voluntarios de Lesaka, donde fue informada de la situación y del desarrollo de los trabajos de extinción. En los mismos participaron casi cien personas, incluidos los efectivos de la Unidad Militar de Emergencias, con 40 vehículos, 2 helicópteros y un avión contraincendios.
El incendio se inició el sábado en una zona de monte arbolado de Igantzi por la caída de un árbol sobre un tendido eléctrico, y se propagó favorecido por el fuerte viento, las elevadas temperaturas y la ausencia de humedad tanto en el suelo como en la vegetación. Tras arrasar la falda de monte de la parte de Igantzi, pasó la cumbre de Frain, y se propagó ladera abajo hacia la localidad de Lesaka, aunque sin llegar a afectar a los caseríos localizados en el barrio homónimo. - A. Zabaleta/ A. Arotzena