pekín - La capital china comenzó ayer a tomar las medidas que corresponden a la activación de la alerta roja por contaminación, la primera que se decreta en el país, con la que quiere demostrar que se toma en serio el problema y que a la vez supondrá un examen a su capacidad para gestionarlo.

Activa desde las 07.00 local (24.00 hora peninsular española del lunes) hasta las 12.00 del jueves (05.00 hora peninsular española), Pekín experimenta lo que supone vivir bajo alerta roja por contaminación desde que este sistema de cuatro colores (rojo, el más grave, seguido de naranja, amarillo y azul) fue puesto en marcha en 2013.

“Estamos tomando medidas activas”, dijo ayer una portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores chino, Hua Chunying, quien remarcó que China es “todavía un país en desarrollo” que “ha pagado el precio” de décadas de enriquecimiento.

Entre las medidas que marca la alerta roja figura que los automóviles privados sólo circulen en días alternos y la prohibición de salir a la carretera a camiones pesados, mientras el transporte público ha extendido los horarios y aumentado sus servicios para contrarrestar las restricciones.

medidas Además, se suspenden las obras y las fábricas contaminantes han reducido o parado su producción, entre ellas las de generación de energía, las siderúrgicas y las de producción de cemento y coque.

Un paquete que, de momento, se limita a aliviar el habitual denso tráfico de la metrópolis, también reducido por la recomendación a las escuelas primarias y secundarias de que suspendan las clases y la petición a empresas e instituciones oficiales de permitir horarios flexibles para sus trabajadores.

Pese a las medidas, la contaminación a las 18.00 hora local (11.00 hora peninsular española) marcaba 400 microgramos por metro cúbico de partículas PM 2,5 -las más perjudiciales para la salud-, según el medidor de World Air Quality Index, un proyecto con sede en Pekín, más de quince veces por encima de la máxima de 25 microgramos recomendada por la Organización Mundial de la Salud (OMS). - Efe