MADRID. El consumo moderado de cerveza podría influir en la prevención, control y evolución de la diabetes por los componentes naturales que contiene esta bebida, según ha mostrado el estudio 'Efecto preventivo y protector del consumo moderado de cerveza en la Diabetes Mellitus', elaborado por el catedrático de Nutrición y Bromatología de la Universidad Pablo de Olavide de Sevilla, Franz Martín Bermudo.

Se trata de una bebida de baja graduación alcohólica que contiene minerales como el magnesio o el sicilio, antioxidantes, fibra, agua y compuestos polifenólicos que, tal y como ha comentado el experto, podrían actuar sobre los mecanismos y procesos que desencadenan la diabetes y sus posteriores complicaciones.

"Esta revisión bibliográfica parte de estudios recientes que han demostrado que las personas que consumen cerveza moderadamente tienen unos hábitos de vida más saludables y, además, un índice de masa corporal menor", ha explicado Martín Bermudo.

Entre los factores que reducen el riesgo de padecer diabetes mellitus 2, enfermedad que afecta al 14 por ciento de la población en España, se encuentra una dieta rica en fibra y en polifenoles. Por el contrario, el déficit de minerales como el magnesio está relacionado con un incremento del riesgo de padecer esta patología.

LA CERVEZA AUMENTA LA CAPACIDAD ANTIOXIDANTE DEL PLASMA

En este sentido, el estudio ha recalcado que el consumo de moderado de cerveza es capaz de aumentar la capacidad antioxidante del plasma, además de proteger las células beta pancreáticas (las que liberan insulina) del daño que les puede causar un estilo de vida inadecuado. Asimismo, la fibra y los compuestos fenólicos que contiene desempeñan un papel antiinflamatorio para hacer frente a los procesos inflamatorios relacionados con la diabetes.

De hecho, según el estudio 'Cerveza, Dieta Mediterránea y enfermedad cardiovascular', elaborado por el Hospital Clínic de Barcelona y la Universidad de Barcelona, las personas que consumen cerveza de forma moderada (un máximo de 3 cañas al día para los hombres y 2 para las mujeres) podrían tener una menor incidencia de diabetes mellitus e hipertensión, así como unas cifras de HDL-colesterol mayores que los no bebedores.

Por tanto, y siempre que se trate de adultos sanos, el consumo moderado de cerveza podría tener "efectos positivos" para el organismo, motivo por el cual la Sociedad Española de Nutrición Comunitaria (SENC) incluye en la 'Pirámide de la Alimentación Saludable' la ingesta opcional y moderada de esta bebida.