budapest - El Ejército húngaro inició maniobras para estar preparado para un posible despliegue para defender la frontera e intentar evitar la entrada de refugiados, informó el Estado Mayor. “Si el Ejército va a ser movilizado en la defensa de la frontera, solo podrá hacerlo con soldados preparados”, dijo el jefe del Estado Mayor, Tibor Benkö, según informaron ayer los medios húngaros. Benkö agregó que en algunas partes del país habrá “movimiento de dispositivos técnicos”, es decir, desplazamiento de vehículos militares, aunque no precisó detalles. El Gobierno húngaro presentó hace dos semanas un proyecto de ley que prevé la movilización del Ejército para apoyar a la Policía en la defensa de la frontera.
Esta legislación debe ser aún aprobada por el Parlamento, aunque se espera que salga adelante sin problemas gracias a la amplia mayoría con la que cuenta el conservador Fidesz, el partido del Gobierno, que cuenta en este tema además con el apoyo del ultraderechista Jobbik.
El ministro de Defensa, István Simicskó, que asumió ayer su cargo tras la reciente dimisión de su antecesor, ha asegurado que muy pronto se reforzará la vigilancia de la frontera con hasta 4.000 militares.
“Enviaremos 3.000 o 4.000 soldados a la frontera, incluyendo reservistas”, adelantó Simicsko ante la comisión de Defensa del Parlamento húngaro.
medidas Hungría levantó una alambrada a lo largo de 175 kilómetros de frontera con Serbia y está construyendo una segunda barrera más alta y robusta.
En lo que va de año, unas 170.000 personas, la mayoría refugiados de zonas que se encuentran en conflicto en Oriente Medio, han entrado en Hungría. La inmensa mayoría desea cruzar cuanto ante el país y seguir camino hacia Austria y luego Alemania, el destino final deseado para casi todos.
En el punto de reunión de Röszke, junto a la frontera con Serbia, centenares de refugiados han vuelto a pasar la noche en tiendas y al raso.
Las malas condiciones de acogida, las largas esperas antes de poder seguir camino de Alemania y el miedo a que ser identificado en Hungría dificulte ese viaje, ha provocado ya en los últimos días varios intentos de fuga de ese centro de reunión para dirigirse directamente a Budapest y desde allí a Austria.
En la estación Keleti de Budapest los refugiados siguen subiendo a los trenes que parten hacia Austria, Alemania o hasta la frontera austríaca, para cruzarla luego a pie.
procedimiento Además, el Gobierno húngaro anunció ayer que cerrará antes del 15 de septiembre el hueco en valla alambrada que construyó en la frontera con Serbia, por donde circulan los trenes entre ambos países y que aprovechan los refugiados de Oriente Medio para entrar en el país.
Así lo anunció ayer el ministro de Gobernación, János Lázár, ante la prensa en Budapest, al explicar que a partir del martes próximo “todo cambiará”, ya que en esa fecha entrarán en vigor las leyes que endurecen las penas por el cruce ilegal de las fronteras. Miles de refugiados entran en Hungría a diario desde Serbia, muchos de ellos siguiendo la vía férrea, ya que allí la valla con concertinas no pude ser construida para no imposibilitar el paso de los trenes.
Lázár explicó que después de que entren en vigor las leyes que penalizan el simple cruce de frontera ilegal, los refugiados “solo podrán entrar en Hungría después de presentar su solicitud de asilo ante las autoridades”.
Por otra parte, Hungría podría completar la construcción de la valla de 3,5 metros de altura a lo largo de su frontera con Serbia para principios de octubre con el objetivo de frenar el flujo de inmigrantes y refugiados, según declaraciones del jefe de gabinete del primer ministro.
Además, Janos Lazar informó en la rueda de prensa semanal que se celebró ayer que en lugar del plazo inicial previsto para el 31 de octubre, los equipos de construcción húngaros se están apresurando en completar la construcción de la valla, de 175 kilómetros de extensión, en unas semanas.
“Esta valla de 3,5-4 metros de alto puede ser adecuada para proteger el país, especialmente si los policías están patrullando del otro lado”, aseguró el ministro de Gobernación. - Efe/E.P.