MADRID. El Papa Francisco se ha convertido en el primer pontífice que entra en un templo evangélico, donde ha pedido perdón a los protestantes en nombre de la Iglesia católica. El Pontífice realizó una visita a un templo de la Iglesia evangélica valdense en su viaje apostólico a Turín.

"La Iglesia católica os pide perdón por las actitudes no cristianas o no humanos contra vosotros. En nombre de Jesucristo perdonadnos", ha expresado Francisco.

El pontífice ha reconocido que gracias al "movimiento ecuménico" se ha redescubierto la "fraternidad de todos los que creen en Jesucristo" al tiempo que ha subrayado la "profunda conexión" que existe entre católicos y evangélicos a pesar de las diferencias.

El Papa ha explicado que la "unidad" se construye "en camino" a través de la "oración" y "la conversión personal" y ha pedido que con "la ayuda de los teólogos" la comunión entre cristianos pueda ser "plena en la verdad y en la caridad".

Asimismo ha reconocido que la "unidad no es uniformidad" y que por tanto no implica un "mismo estilo" o una "idéntica organización interna" por ello ha lamentado que en el pasado no se haya aceptado "la diversidad" y se haya hecho "la guerra" de uno con el otro.

"Solo podemos entristecernos ante las violencias cometidas en nombre de la propia fe. Solo podemos reconocernos todos pecadores y saber perdonarnos unos a otros", ha expresado Francisco.

Durante su discurso el Papa ha llamado a católicos y evangélicos a "caminar juntos" y a colaborar sobre todo en "la evangelización" de los hombres "que, a veces, parecen distraídos e indiferentes".

Así ha instado a caminar hacia la unión eucarística y ha pedido "que las diferencias teológicas que existen entre católicos y protestantes no impidan la colaboración".

Finalmente ha constatado que las relaciones entre católicos y protestantes cada vez más "se basan mutuo respeto y caridad fraterna" y ha llamado a cumplir juntos "un servicio a la humanidad, que sufre a los pobres a los enfermos a los inmigrantes".

El pontífice ha sido recibido en la Iglesia valdense por el pastor Eugenio Bernardini y por el presidente del Consistorio de la Iglesia evangélica, Paolo Ribet.

Bernardini ha expresado al pontífice que no están de acuerdo con la nominación "comunidad eclesial" que ha dado a los evangélicos el Vaticano porque -según ha dicho- ellos son "Iglesia".

"El Vaticano nos ha definido comunidad eclesial. En realidad, no hemos entendido bien qué es lo que quiere decir", ha explicado.

Mientras, el Papa Francisco ha sido llamado por los valdenses como "el hermano de la Iglesia".