MADRID. Así lo hará en breve tras aceptar una petición del Hospital Carlos III de Madrid, con el que se habrían puesto en contacto los gobiernos de varios países europeos para obtener un tratamiento.
Para la donación del plasma, Romero se conectará a un separador celular, basado en un sistema de centrífuga, que separa las diferentes células sanguíneas y recoge el plasma.
La auxiliar de Enfermería ya adelantó al salir del hospital su intención de donar sangre para obtener suero inmunológico. "Si con mi sangre se puede curar, aquí estoy para quedarme seca", manifestó entonces, recalcado que esperaba que su contagio hubiera servido de "algo" en aras a que se pudiera investigar la enfermedad.
Tras casi dos meses desde entonces, Teresa sigue de baja con motivo de las secuelas que le ha dejado la enfermedad. Una vez que se encuentre bien, volverá a su plaza de interina en el Carlos III.