PARÍS. La última pieza, sumergida en el océano y con un peso de 80 toneladas, fue retirada el domingo pasado, lo que va a permitir reabrir la playa al público en los próximos días.
Las operaciones de desguace y evacuación, en las que se retiraron 1.400 toneladas de chatarra y que corrieron a cargo de la empresa holandesa Switzer, se iniciaron el 17 de marzo pasado y se han visto dificultadas en estos meses por las condiciones meteorológicas y el peso de algunas piezas.
En el momento del naufragio, el "Luno" transportaba unos 130 metros cúbicos de gasóleo, que fueron extraídos días después del siniestro para evitar su vertido.
Una vez vaciado de carburante, la siguiente etapa consistió en desmantelar los restos del barco, que chocó contra un dique del puerto de Bariona, debido al fuerte oleaje, y qued
La última fase se llevará a cabo esta semana y consistirá en la limpieza de la playa, concluye la nota, en la que el alcalde de Angelu, Claude Olive, asegura que "el 'Luno' pronto no será más que un recuerdo".
ó divido en tres.