MADRID. Así lo explica el informe 'Pobreza infantil y Exclusión Social en Europa', presentado este martes en seis países, del que se desprende que cerca de 27 millones de niños corren el riesgo de caer en esta situación en la UE más Islandia, Noruega y Suiza, cifra que se ha incrementado en un millón entre 2008 y 2012, medio millón sólo en ese último año.
Frente a esta situación, hay países que ponen en marcha políticas sociales que funcionan y otros que no. Es el caso de España, donde uno de cada tres niños vive ya bajo el umbral de la pobreza sin que las transferencias públicas hayan conseguido amortiguar estas tasas más allá del 6,9%, según el informe. En los países nórdicos, estas iniciativas han conseguido recortar la pobreza infantil en un 18% en plena crisis económica.
"Nuestro país está a la cola de Europa, junto con Grecia, en capacidad de reducir la pobreza infantil con ayudas sociales. Antes de las prestaciones, el porcentaje neto de niños bajo el umbral de la pobreza es en España de un 36,8%. Con las ayudas, un 6,9% de estos niños salen del umbral, de manera que la tasa se sitúa en el 29,9%. Si nos comparamos con Irlanda, país que ha sufrido una situación económica similar, sus prestaciones han conseguido reducir la pobreza infantil en 32 puntos, pasando de un 49,1% a un 17,1%", explica Save The Children.
El informe aborda la realidad multidimensional de la pobreza infantil y trata desde la situación laboral de los padres, "la mera participación en el mercado laboral no es necesariamente suficiente para escapar de la pobreza", hasta las condiciones de la vivienda y la situación escolar de los niños de cada uno de los 31 países analizados, para concluir que acabar con la pobreza "supone tomar las decisiones políticas adecuadas", que están al alcance de todos los Estados, al margen de su PIB.