SANTIAGO DE COMPOSTELA. Rocío Beceiro y Ricardo Pérez, abogados de la asociación Clara Campoamor que vela por los derechos de la infancia y que en esta causa ejerce la acusación popular, han contado este hecho a los medios que aguardaban ante los edificios judiciales del compostelano barrio de Fontiñas, donde la jornada fue de ajetreo con más testificales.

Han explicado que una de las docentes ha comentado que la menor estaba "drogada" esa jornada, y la otra que "parecía mareada y presentaba un aspecto de sonámbula" ese día en clase. "La definen como sonámbula y dicen la palabra drogada", han puntualizado los letrados de Clara Campoamor.

Cuando avisaron a sus padres, la abogada Rosario Porto y el periodista Alfonso Basterra, acudió a recogerla él y les explicó que la pequeña tenía alergia y estaba tomando una medicación muy fuerte que la dejaba aturdida, una dolencia desmentida en la instrucción por la pediatra de la víctima.