El Gobierno español ahorraría cerca de 97 millones de euros si traspasa el coste total que suponen los profesores de Religión, en Infantil y Primaria, de Andalucía, Aragón, Canarias y Cantabria, las únicas comunidades que todavía no tienen asumidos dichos gastos. Según un informe, en el curso 2012-2013 el Estado costeó las nóminas de 2.988 profesores y 137 sustitutos.