El goteo de fondos europeos destinados a cofinanciar las redes transeuropeas de transportes seguirá llegando a Euskadi. En esta ocasión, según el Ejecutivo comunitario, serán casi 10 millones de euros los asignados a la Comunidad Autónoma Vasca con cargo a las convocatorias de 2012. De ellos, 5,9 irán destinados a financiar la construcción del tramo guipuzcoano del tren de alta velocidad y otros 4 cuatro a mejoras medioambientales y operaciones más eficientes en el Puerto de Bilbao. En total, la UE financiará 172 proyectos con 1.600 millones de euros que irá aprobando de forma gradual de aquí a finales de diciembre.

"Una red que funcione bien es esencial para el buen funcionamiento del mercado interior y para impulsar la competitividad. Estos proyectos también servirán a Europa para avanzar hacia un futuro más sostenible y nos permitirá un mejor acceso a los mercados regionales", esgrime el vicepresidente y comisario de transportes, Siim Kallas. Su anuncio coincide con las jornadas sobre redes transeuropeas y el instrumento Conectar Europa celebradas en los últimos días en Tallín. Un encuentro al que asistió la eurodiputada del PNV, Izaskun Bilbao, y que aprovechó para pedir compromisos e inversiones a gobiernos e instituciones.

Ayer el ministro francés de transportes, Frèdèdic Cuvillier, respondía a preguntas de los periodistas, que su país no se cuesta los proyectos de alta velocidad que deben unir Francia con la península ibérica pero admitió que podría haber retrasos. "Necesitamos mirar la sostenibilidad de los grandes proyectos", insistió esgrimiendo el problema de la crisis y las dificultades financieras que atraviesan. Pese a este posicionamiento, prueba del interés que tiene Bruselas por desarrollar el corredor atlántico es que la convocatoria de 2012 tampoco se olvida de regar con algunos millones al Ejecutivo galo. Concretamente, destinará una partida de 5,6 millones para cofinanciar estudios en un tramo de 12 kilómetros entre Burdeos y Hendaia que tendrá que estar terminado para diciembre de 2015.

corredor atlántico Lo que ayer quedó de manifiesto es que el corredor atlántico, junto con el mediterráneo, es uno de los nueve ejes prioritarios de la nueva red central de transportes que Bruselas quiere ver terminada para el año 2030. Una red que conectará Europa de norte a sur y de este a oeste. Un total de 94 grandes puertos europeos, entre ellos el de Bilbao, con líneas ferroviarias y carreteras, permitirá enlazar 38 aeropuertos con el tren, convertir 15.000 kilómetros en líneas de alta velocidad y terminar con los cuellos de botella en muchos tramos transfronterizos. La Comisión Europea presentó ayer su mapa definitivo pero serán los gobiernos, a partir del 1 de enero de 2014, los responsables de pasar a la acción y preparar los proyectos. En cuanto a la financiación, la UE asignará un total de 26.000 millones de euros, el grueso para el desarrollo de la red central. Los gobiernos podrán optar a las ayudas siempre y cuando los proyectos ofrezcan un alto valor añadido europeo y tengan la madurez necesaria para ser ejecutados entre 2014 y 2020. En líneas generales, podrán recibir hasta el 20% de los costes de inversión totales, hasta el 50% para elaboración de estudios y para hacer la transición a sistemas de transportes inteligentes como el ERTMS, y hasta un 40% a estudios y obras de construcción de tramos transfronterizos. El resto lo tendrán que aportar Estados y gobiernos regionales.