sON las nueve de la mañana y Ander Gómez espera en la rotonda de las calles Reina Sofía y Naciones Unidas. El joven hace las veces de guía para todas aquellas personas que quieren conocer consejos básicos para andar en bici por la ciudad y que, sobre todo, quieren saber cuál es el camino más corto para llegar a sus puestos de trabajo. La experiencia ha sido puesta en marcha por el Ayuntamiento de Gasteiz en el marco de la Semana de la Movilidad, y es tan sencilla como útil.
Hoy la ruta va a partir de Zabalgana para llegar hasta la redacción de NOTICIAS DE ÁLAVA. Lo primero, antes de ponerse en marcha, es entregar al usuario del servicio el nuevo mapa de bidegorris de la ciudad, actualizado este mismo año, y donde aparecen además zonas 30, calles de escaso tráfico y las rutas verdes de la capital alavesa. "Luego -explica Ander- entregamos un manual superbásico con la normativa para andar en bicicleta, sabiéndote esto ya puedes dar un clinic de cómo andar en bici por Vitoria". Por último, se le recuerda al ciclista que en Gasteiz hay que llevar timbre en la bicicleta, que el casco, si bien no es obligatorio, "sí es recomendable", y que con este vehículo es fundamental ser "previsor y visible. Previsor -prosigue- en el sentido de que sepa con un poco de antelación las rutas, que tenga en cuenta el tiempo que va a hacer, o si hay puntos con mucha aglomeración, como las ikastolas. En cuanto a la visibilidad, no es lo mismo estar con sol, que con niebla, que ir de noche, hay que llevar la vestimenta adecuada, con reflectantes y luces".
Dicho esto, comienza la ruta. El bidegorri describe una curva en Castillo de Quejana y allí, en el asfalto, aparece la zona 30. "En esta parada intermedia -explica Ander- tratamos sobre la convivencia de la bicicleta en la ciudad. El peatón tiene la prioridad y las bicicletas pueden pasar siempre que la acera tenga una anchura de más de tres metros", recuerda el joven, quien señala que los vitorianos todavía no conocen muy bien la normativa, y por ello se les hace hincapié en que "la calzada en sí ya pertenece a la bici, y quien tiene que adecuarse a su velocidad son los vehículos".
Ander explica, antes de retomar la marcha, que cuando ni hay aceras anchas, ni bidegorri, ni zona 30, el ciclista debe circular por la calzada "respetando las normas de seguridad como si fuera un vehículo más, y debe extremar las precauciones porque ahí sí que los coches no te tienen en cuenta". Y si se tiene miedo o inseguridad, lo mejor es bajarse y seguir andando hasta encontrar un nuevo bidegorri. "Hay que conocer los límites de cada uno a la hora de dominar la bicicleta", recomienda el joven.
Ander, en todo caso, dice circular muy tranquilo por las zonas 30. "Hasta que no los utilizas en serio no te das cuenta de los realmente cómodo que es", asegura.
Última parte del trayecto. Tras cruzar el Puente de Castilla, la comitiva accede a la Avenida y se detiene bajo el Diario. Llegan los últimos consejos. "Hay que tener un buen candado y evitar dejar la bici en árboles, farolas y mobiliario urbano, hay que aprovechar los nuevos aparcabicis, que están mejor situados que antes", explica Ander.