vitoria. Es un hecho que muchas de las plantas de la fachada vegetal del Europa se han secado. No lucen tan verde como los ciudadanos esperaban, tal y como el lunes denunció DNA. A esto se une que el pasado sábado un problema en el sistema de riego provocó una pequeña inundación en el edificio de la Avenida. Nada grave ni fuera de lo normal según el Ayuntamiento, ya que la obra aún no ha concluido y no lo hará hasta finales de este mes, fecha para la que se espera que todo funcione correctamente. Mientras tanto, las plantas secas y amarillentas se retirarán y se colocarán otras nuevas.
El sistema de autorriego está en estos momentos en pruebas, razón por la que el riego se realiza hasta ahora de forma manual, lo que ha provocado que algunos ejemplares se sequen. Cuando los sensores que regulan de forma automática la cantidad de agua y nutrientes que necesita cada planta estén a pleno rendimiento, el gobierno municipal asegura que la fachada vegetal del Palacio Europa lucirá verde.
En cuanto a la falta de movimiento en las obras durante el mes de agosto, el Ayuntamiento asegura que se debe a que durante esas semanas, los operarios se han centrado en programar el sistema informático que regula el riego y controla los nutrientes de las plantas. “Este es un trabajo que al pasar por la calle no se ve, de ahí que a los vecinos les haya podido parecer que las obras estaban paradas”, constatan. Después de terminar con la colocación de las plantas de la parte norte del edificio, en agosto se ha hecho acopio de las que lucen en la fachada sur, además de avanzar en esta estructura.
ahorro de energía El ejecutivo de Javier Maroto defiende que la fachada vegetal del Europa servirá ?cuando las obras finalicen? para ahorrar en el gasto de energía del edificio y, por tanto, reducir las facturas de luz y calefacción del Ayuntamiento. Sin embargo, la oposición se cuestiona si merecerá la pena este ahorro teniendo en cuenta el gasto de mantenimiento de la estructura verde; un coste que el alcalde aún no ha concretado. Durante el primer año correrá a cargo de la empresa contratada, pero después lo pagará el erario público.
No es éste el único ejemplo de edificio sostenible que el PP plantea para que la ciudad ahorre energía. La construcción de las nuevas oficinas municipales que se levantarán junto al ambulatorio de San Martín también contempla medidas de eficiencia energética.