Vitoria. En 1395 Agurain inauguró su feria agrícola y ganadera con motivo de la celebración de la Virgen del Rosario, una tradición que ha pervivido a lo largo de los siglos y que, aunque ya no se hacen tratos de ganado, sirve de excusa para exponer ante vecinos y visitantes lo mejor de nuestros montes y campos y de paso disfrutar de unos cuantos días de juerga. Las fiestas del Rosario se prolongan durante toda una semana en la que las cuadrillas dan todo de sí en la cena popular, en el concurso de fandangos y, en general, en los bares y en la calle.

En cuanto a la feria de ganado, los puestos de pastel vasco, pan casero, queso, miel o txakoli son el complemento perfecto a la exhibición de las reses. En estos primeros días de octubre (la feria se celebra el 8) en Agurain se pueden admirar vacas pirenaicas, caballos, ovejas, cabras, cerdos e incluso asnos, que habitualmente hacen las delicias de los más pequeños, siempre amigos de los animales. En la plaza de San Jorge se celebran los concursos en los que estas reses miden su porte.