madrid. El anuncio realizado el pasado lunes por el ministro de Educación, José Ignacio Wert, de que los universitarios que no lograran un 6,5 no tendrían becas, cayó como una jarro de agua fría en el Gobierno, que se movilizó esa misma mañana para que suavizara la medida. Wert recibió una inmediata y sonora contestación por parte de las CCAA, la mayor parte de ellas del Partido Popular. Sin embargo, menos sonoro, pero más efectivo fue el mensaje que recibió el Ministerio desde la Moncloa, donde se pidió que buscaran la oportunidad para dar marcha atrás y evitar la contestación social que puede tener. Finalmente, Wert anunció que la nota para acceder a una beca para pagar la matrícula universitaria será de 5,5, pero mantuvo el 6,5 para lograr una beca con mayor dotación económica para poder seguir los estudios universitarios. Una vez rebajado, el ministro fue respaldado por el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy.