Ocho personas han sido condenadas por la Audiencia de Álava a un total de 31,5 años de cárcel y al pago de indemnizaciones que suman más de 112.000 euros por traficar con cocaína y hachís en distintos puntos de España. Esta pena es muy inferior a los 80 años de cárcel y 3,3 millones de euros en multas que pedía la Fiscalía.