gasteiz. La situación de la comunidad LGTB a lo largo del planeta es tan dispar como la idiosincrasia de cada uno de los países que lo componen. En los últimos días, dos estados en concreto han acaparado los informativos de medio mundo por los pasos que han dado para legalizar el matrimonio entre personas del mismo sexo, Uruguay y Francia. Las uniones ya son perfectamente legales en el primero, tras el refrendo de su Cámara de Diputados, mientras que en el segundo se están dando los pasos necesarios para que sean una realidad sólo en unos días. Uruguay se ha convertido de esta forma en el segundo país de América Latina tras Argentina en reconocer las uniones homosexuales.
La Ley de Matrimonio Igualitario, lógicamente rechazada también por la Iglesia católica uruguaya, fue aprobada con el voto a favor de 71 de los 92 parlamentarios presentes en la sesión donde se debatió el texto, en medio de una enorme fiesta protagonizada en las gradas de la Cámara por los defensores de los derechos de los homosexuales y de personas y parejas beneficiadas por la decisión. Un paso de gigante para un colectivo que ya puede contraer matrimonio en otros once estados del mundo, Holanda, Bélgica, Canadá, España Sudáfrica, Noruega, Suecia, Portugal, Islandia, Dinamarca y la ya citada Argentina, así como en diez estados más de Estados Unidos, la capital de México, el estado de Quintana Roo del propio país azteca y diez unidades federales de Brasil.
En Francia, entretanto, la nueva Ley comenzó ayer a ser examinada por la comisión de leyes de la Asamblea Nacional y será debatida en el Pleno a partir del próximo miércoles 24, como paso previo a su visto bueno en segunda lectura. El texto fue aprobado en primera instancia por los diputados franceses el 12 de febrero y por el Senado este pasado viernes. En la calle, los opositores han radicalizado sus protestas y anuncian nuevas manifestaciones "multitudinarias" de cara a los próximos días. Este mismo domingo, la Policía francesa detuvo a 67 opositores a la ley que pretendían acampar frente a la asamblea nacional.
Cabe recordar también que la situación del colectivo homosexual sigue siendo dramática en muchos países del mundo, donde sus conductas son castigadas con largas penas de cárcel e incluso la pena de muerte. A día de hoy, 78 países criminalizan las relaciones homosexuales y en Irán, Mauritana, Arabia Saudí, Sudán y Yemen están castigadas con la pena capital. Uganda podría ser el próximo.